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Yannick Masmondet y Oil’live Green recolectaron hace unos días sus primeras aceitunas en Aude, con ambiciosos planes de plantación hasta 2025.
Acompañado del nuevo olivarero Sébastien Balmigère, Yannick Masmondet, director general de Oil’live Green, se mostró muy orgulloso y satisfecho este jueves viendo cómo la máquina cosechadora recogía las primeras aceitunas para la empresa que él mismo había creado. Durante tres años, con socios financieros a los que logró convencer, trabajó incansablemente para poner en marcha este ambicioso proyecto de desarrollo del cultivo del olivo en el suroeste del país. “En Francia producimos 5.000 toneladas de aceitunas, mientras que el consumo en aceite ronda las 130.000 toneladas. Sin duda, hay un lugar que ocupar con la ayuda de los agricultores que buscan soluciones”, predice.
Metas ambiciosas
Las primeras siembras se realizaron en noviembre del año pasado y, a la fecha, son 450 hectáreas. Los objetivos son ambiciosos y prevén plantar 1.000 hectáreas en 2025 en varios departamentos de Nueva Aquitania y Occitania. En Aude, ya se han plantado unas 60 hectáreas, incluida esta parcela de dos hectáreas situada en Berriac, la primera en entrar en producción.
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El director general explica: “Normalmente se necesitan tres años para obtener la primera cosecha. Aquí nos beneficiamos de la retirada de un cliente español para recibir plantas más viejas y más grandes”. España es de hecho el principal productor de plantas con Marruecos. Las variedades consumen menos agua y se adaptan especialmente bien a la sequía que afecta a nuestra región desde hace varios años.
Un sitio en Beragne previsto
A este respecto, el gerente precisa: “Estas variedades de aceituna necesitan 600 mm de agua al año, mientras que en Carcassonnais, por ejemplo, las precipitaciones fueron de 545 mm durante todo un año. A pesar de la actual falta de agua, estamos al límite de poder producir estas aceitunas sin riego. La continuación lógica será la construcción de un primer molino en Carcassonne de aquí a 2027. “Este jueves por la mañana, en presencia del presidente de Carcassonne Agglo, Régis Banquet, abordamos este proyecto que debería costar alrededor de 7 millones de euros con una instalación en cinco hectáreas que incluyen recepción, molino para una producción equivalente a 3.000 hectáreas y unidad de almacenamiento. Se prevé el emplazamiento de Béragne”, anuncia Yannick Masmondet.
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