Este sábado 21 de diciembre se organizó una manifestación en Reims contra los centenares de puestos de trabajo perdidos en la industria del Marne. Los empleados de Valeo, ArcelorMittal y Reims Aerospace hicieron oír su voz.
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Un centenar de personas se reunieron en el centro de la ciudad de Reims (Marne), en la plaza Drouet-d’Erlon, este sábado 21 de diciembre de 2024, para denunciar los despidos y los recortes de empleo en la industria del Marne.
Unos días antes de Navidad, los Centros de Servicio de ArcelorMittal anunciaron el cierre de su sede de Reims durante el mes de junio. “No es fácil. Trabajo en Arcelor desde hace 18 años. Todavía encuentro allí un ambiente familiar”afirma Amar Ait Addi, agente de mantenimiento de ArcelorMittal. “Realmente tengo un sabor amargo. Porque, ya, es brutal. Se anunció un poco antes de las vacaciones de fin de año. Puede que nunca llegue un buen momento, pero éste es realmente muy feo”subraya Agnès Laurent, representante sindical de Force Ouvrière en ArcelorMittal.
En cuanto al proveedor de automóviles Valeo, la preocupación es la misma, con la anunciada eliminación de un centenar de puestos en Reims. “Lo que nos ha dicho la dirección es que, por el momento, tenemos una visibilidad de dos años. Si no tenemos nuevos mercados para entonces, todo será muy complicado, lo que podría llevarnos al cierre. indica Pascal Valladou, secretario general de FO en Valeo.
Todos denuncian la competencia extranjera, como los empleados de Reims Aerospace, cuya empresa acaba de ser liquidada. 75 puestos de trabajo están afectados. “Para nosotros va a la India. El trabajo también se hace en China, por lo que nuestro gobierno no nos ayuda en absoluto, lo que significa que la deslocalización va en aumento”.asegura Jérôme Jesson, representante sindical de la CGT en Reims Aerospace.
Deslocalizaciones también denunciadas por algunos políticos. “A partir del momento en que las empresas se benefician de fondos públicos, deberíamos imponer una condicionalidad social que prohíba los despidos, exige el eurodiputado del LFI Anthony Smith. El Estado tiene derecho de inspección. Distribuye dinero sin fondos sin pedir cuentas. Lo mismo ocurre con la Región del Gran Este que, por ejemplo, ha donado cientos de miles de euros a Valeo. Ya es suficiente, tenemos que recuperar el control”.
Prevenir el cierre de fábricas y conservar los empleos en la región son uno de los grandes temas para el próximo gobierno.
