La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó su admiración por el resultado histórico obtenido por la Agrupación Nacional en la primera vuelta de las elecciones legislativas en Francia. Este lunes, Meloni dijo que satanizar a la extrema derecha ya no era una estrategia eficaz.
El ascenso de la extrema derecha en Europa
Meloni, que dirige el partido Fratelli d’Italia, dijo a la agencia Adnkronos que “el continuo intento de demonizar a quienes no votan a la izquierda… es una trampa en la que cada vez cae menos gente”. Esta tendencia es cada vez más visible, añadió, no sólo en Italia, sino también en Europa y en todo Occidente.
Como líder del gobierno italiano desde octubre de 2022, Meloni consolidó su posición en las elecciones europeas al obtener el 28% de los votos. Su gobierno está en coalición con el partido conservador Forza Italia, fundado por Silvio Berlusconi, y la Liga, un partido antiinmigración liderado por Matteo Salvini.
Una visión optimista para Europa
Meloni destacó su deseo de que desaparezcan las viejas divisiones en Europa entre fuerzas alternativas de izquierda. “Siempre hemos querido eliminar las viejas barreras en Europa entre fuerzas alternativas de izquierda, y parece que también en Francia estamos avanzando en esa dirección”, afirmó.
En cuanto a la segunda vuelta de las elecciones francesas, Meloni señaló que el escenario está muy polarizado. Cuando se le preguntó si prefería la extrema izquierda o la derecha, respondió: “Por supuesto, prefiero la derecha”.
Una política europea e internacional estabilizada
En Italia, el partido de Meloni se niega a ser calificado de extrema derecha y se considera simplemente un partido de derecha. Meloni ve positivamente la llegada al poder de un gobierno amigo en otro país fundador de la Unión Europea, que podría romper el aislamiento de su país en la escena europea, especialmente en lo que respecta al reparto de los “puestos clave” en Bruselas.
A pesar de las preocupaciones iniciales de sus socios europeos sobre el compromiso continuo de Italia con la UE y la OTAN, Meloni logró tranquilizarlos mostrando un fuerte apoyo a Ucrania y adoptando una política económica alineada con la de su predecesor, Mario Draghi, ex presidente del Banco Central Europeo. .
