Alrededor de una mesa del Caveau 30 del Cours Félix Faure, una quincena de delegados italianos de MAPIC cenaban tranquilamente, cuando un desafortunado gesto lo puso todo patas arriba.
Un camarero se presentó para llenar el tanque de la lámpara calentadora de etanol. Pero en un movimiento brusco (¿de un huésped?), la lámpara se volcó antes de que se volviera a colocar el tubo protector, nos dijo un testigo.
Cinco personas resultaron afectadas.
Una mujer de 35 años y dos hombres de 30 y 56 años sufrieron quemaduras graves y los tres fueron evacuados al centro hospitalario de Toulon. La mujer en helicóptero, los dos hombres por carretera.
Los otros dos, dos hombres de 54 y 56 años, con heridas leves, fueron evacuados por los bomberos al hospital de Cannes.
Obviamente, la terraza del restaurante fue evacuada y agentes de la policía municipal y nacional establecieron un perímetro de seguridad mientras el comisario central Christophe Haget visitaba el lugar.
Sin duda, una investigación administrativa deberá determinar si se han producido o no violaciones de las normas de seguridad.
Este accidente plantea en cualquier caso la cuestión del uso de este tipo de lámparas, habituales en las mesas de terraza, donde está prohibida toda calefacción tradicional.