CRÓNICA – Al fijar el umbral de riqueza en 4.000 euros, el Nuevo Frente Popular “democratiza” el club de personas destinadas a pagar más impuestos y ofrece toda una gama de opciones para hacerlo.
Del programa económico del Nuevo Frente Popular presentado la semana pasada surgen dos fuertes promesas que nos conciernen a todos. Por un lado, la propuesta de incrementar el salario mínimo neto hasta los 1.600 euros mensuales (2.000 euros brutos) y, por otro, el anuncio de subidas de impuestos para quienes ganen más de 4.000 euros netos al mes. Los primeros representan ahora el 17% de los asalariados franceses y los segundos el 8% de los 40,7 millones de hogares tributarios, subrayan repetidamente los firmantes del NFP. A mi izquierda, “los que ganan el salario mínimo” y a mi derecha, “los ricos”.
Estas cifras, en realidad, parecen irrisorias una vez que salimos del horno del debate electoral franco-francés. Sin duda el aumento del 14,4% del salario mínimo tuvo un efecto inesperado, siendo la referencia en este sentido el aumento del 10% del salario mínimo en mayo de 1981, una de las medidas emblemáticas de la Unión de Izquierdas que se cree insuperable. Pero ¿qué representa un ingreso de 2000 euros comparado con el salario mínimo…?
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