Saint-Laurent-du-Maroni, 25.11.24 – Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Centro Comunal de Acción Social (CCAS) organizó una marcha para sensibilizar a la población. El evento movilizó a participantes y profesionales, recordando la urgencia de actuar frente a la creciente violencia.
Más de 1.000 mujeres víctimas de violencia son acogidas cada año por las estructuras del CCAS, según su vicepresidenta Emilie Roussos. Esta cifra ilustra la magnitud del problema y motivó la organización de una marcha simbólica este lunes, con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
El recorrido, atravesando las principales calles y lugares emblemáticos de la ciudad, tuvo como objetivo concienciar a los vecinos sobre un fenómeno que afecta a todos los niveles de la sociedad.
La violencia doméstica no se limita a situaciones de precariedad, afecta a mujeres de todos los orígenes, ya sean médicas, comerciantes o desempleadas.
subraya Émilie Roussos.
Además de las guarderías, el CCAS también gestiona alojamientos de emergencia, pero esto es en gran medida insuficiente.
Nos enfrentamos a una flagrante falta de lugares donde albergar a las víctimas.
lamenta Emilie Vedder, educadora especializada. Según ella, las llamadas al 115 a menudo quedan sin respuesta por falta de soluciones disponibles.
La CCAS, apoyada por la prefectura y el ayuntamiento, teme que las subvenciones necesarias para mantener estos sistemas no sean sostenibles.
Hay que luchar cada año para garantizar la financiación
alerta a Emilie Roussos. Los profesionales presentes también insistieron en la necesidad de fortalecer los equipos, en particular trabajadores sociales y psicólogos, para apoyar a las víctimas y a sus hijos, a menudo covíctimas.
Entre los participantes, Cándida Hernández, ex víctima, compartió su experiencia.
Es muy difícil, pero es importante demostrar que podemos superarlo.
Esta marcha también sirvió como recordatorio de que las propias víctimas no siempre reconocen que la violencia es anormal.
Muchas mujeres piensan que la violencia es normal en su matrimonio o cultura.
testifica Emilie Vedder. Esta falta de conciencia complica el tratamiento y la prevención.
A pesar de todo, las acciones emprendidas están dando frutos. Varias mujeres logran salir de su situación gracias a un apoyo sostenido, aunque el camino sigue siendo largo. “Cada paso adelante es una victoria”concluye Emilie Roussos.
Al unirse este lunes, Saint-Laurent-du-Maroni envió un mensaje contundente: la lucha contra la violencia contra las mujeres es una lucha colectiva y prioritaria, que no debe debilitarse.