Hasta este jueves se celebra en París el congreso anual de la Asociación de Alcaldes de Francia, con un importante contingente de alcaldes corsos.
Ellos, como sus homólogos continentales, no escapan a la sensación de desgaste que afecta cada vez a más concejales. Se enfrentan al deterioro del clima hacia ellos, pero también entre los ciudadanos.
Ayer, los alcaldes corsos abandonaron este congreso a última hora de la mañana hacia el Ministerio de Descentralización, para participar en una recepción organizada por Catherine Vautrin, responsable del gobierno corso.
El mensaje del ministro, que promete una presencia en Córcega cada seis semanas, ha entusiasmado a algunos alcaldes.
Escuchamos a Ange-Pierre Vivoni, alcalde de Siscu y presidente de la Asociación de Alcaldes de Alta Córcega.
