Bloqueos vinculados a la ordenación del territorio
El concepto actual prevé la creación de viviendas para 70 personas en Alvaneu Dorf y para 100 personas en Tiefencastel, indicaron las autoridades municipales a los vecinos interesados el miércoles por la noche. La gente de la región debe ser tratada con prioridad sobre los residentes secundarios.
Las leyes impiden un realojamiento rápido, criticó un residente de Brienz. Con los acuerdos actuales, se necesitan entre siete y ocho años. Por ello pidió al presidente del municipio de Albula, Daniel Albertin, que se pusiera en contacto directamente con el Consejo Federal y que levantara los bloqueos relacionados con la ordenación del territorio para que las obras de urbanización pudieran comenzar la próxima primavera.
“Una respuesta en principio positiva” de la Confederación
El municipio dice que ha solicitado subvenciones a la Confederación y al cantón. El martes, la Confederación envió “una respuesta en principio positiva” al cantón. Se habla de la voluntad de las autoridades federales de pagar a los interesados una cantidad por las tierras perdidas en caso de realojamiento. Hasta ahora esta pregunta estaba excluida y sólo hablábamos del valor de los edificios. “Es realmente una buena señal”, dijo a Keystone-ATS Christian Gartmann, jefe de comunicaciones del personal de gestión municipal.
La semana pasada, el Ministro de Medio Ambiente, Albert Rösti (UDC), habló también sobre Brienz en el programa informativo “Telegiornale” de la Televisión Italiana Suiza (RSI) y prometió mostrar solidaridad.
Un pueblo que sigue deslizándose
El presidente del municipio, Daniel Albertin, se mostró comprensivo con el deseo de los habitantes de Brienz de no ser trasladados al sombrío valle de Tiefencastel. “No obligaremos a nadie”, subrayó. También espera que todos puedan ir a Vazerol.
Daniel Albertin volvió a su dimisión anunciada a principios de noviembre y prometió permanecer en el cargo hasta finales de 2026, mientras encontraba un sucesor. El miércoles se dirigió a los habitantes de Brienz en un emotivo discurso. En particular, declaró que no quería evacuar a la población por tercera vez.
Están previstas dos medidas de rescate para el pueblo amenazado de Brienz. Además del desplazamiento de residentes ya materializado, se está construyendo una galería de drenaje debajo del pueblo por un importe de 40 millones de francos. Con una longitud de 2,3 kilómetros, debe drenar la masa de tierra y frenar así los deslizamientos de tierra. Actualmente, el pueblo se desliza 2,3 metros por año hacia el valle. Los 1,2 millones de metros cúbicos de deslizamiento de tierra que amenazan al pueblo crecen a un ritmo de 20 centímetros por día. Estos movimientos se deben a fenómenos geológicos.