Francia es el país de Europa con mayores exportaciones netas de residuos metálicos: seis millones de toneladas en 2021, que se reciclan en Bélgica, Alemania o Italia.
Francia podría explotar mejor sus “minas urbanas” de metales, es decir, el reciclaje de sus residuos metálicos, en particular el cobre procedente del desmantelamiento de redes eléctricas, de la demolición de edificios o de accidentes de tráfico, según un informe publicado el miércoles. Francia es el país de Europa con mayores exportaciones netas de residuos metálicos: seis millones de toneladas en 2021, que se reciclan en Bélgica, Alemania o Italia, países importadores netos de residuos, indica la consultora Oliver Wyman en este informe.
Sólo se reciclan 66.000 toneladas de cobre cada año
El ejemplo del cobre, metal crucial para la transición energética, es emblemático. La Francia industrial consume 257.000 toneladas al año, en particular para fabricar los demandados cables eléctricos, estratégicos para la electrificación de los usos actuales, que permitirán sustituir el petróleo y el gas de origen fósil que calientan el clima. Sin embargo, cada año también se recogen unas 218.000 toneladas de residuos de cobre procedentes de obras de demolición o de otras fuentes. De este total, sólo se reciclan 66.000 toneladas al año en el territorio.
Se exportan unas 206.000 toneladas y se importan 53.000 toneladas, completa el informe, que recopila cifras de varias fuentes, en particular el informe nacional de reciclaje de Ademe, la agencia de transición energética. “Estamos ante un problema de balanza comercial, porque este valor añadido podría capturarse en Francia”, estima Eric Confais, socio de la empresa Oliver Wyman, “siempre que dispongamos de instalaciones hidrometalúrgicas industriales para separar las aleaciones y los machefers” y poder capaz de competir con Umicor en Bélgica o Aurubis en Alemania.
“Si duplicamos el reciclaje de cobre en Francia, el país podría reducir su déficit comercial en un 3%” y podría mejorar sus resultados para la descarbonización del sector de los residuos, que está “estancado”.
Una única planta de reciclaje de cobre en Francia
Para “promover el desarrollo de sectores industriales de recogida, clasificación de residuos metálicos y transformación en materias primas recicladas”, sería necesario jugar con la normativa “imponiendo tasas de incorporación de materiales reciclados como las que existen para el plástico en particular”. y “también deberíamos limitar la exportación de residuos metálicos”, explica Eric Confais.
Francia dispone actualmente de una sola planta de reciclaje de cobre, en Lens (Paso de Calais), gestionada por el grupo de cable Nexans, en conexión con Suez. Nexans ha anunciado una ampliación de sus instalaciones hasta 2026 para aumentar su producción en más de un 50% y permitirle reciclar “hasta 80.000 toneladas de cobre al año”.
