El diario congoleño INFORMACIÓN27aparecido en Kinshasa, publicó el martes un artículo bajo el título “Le Chellah: una joya milenaria en el corazón de Rabat”firmado por su Enviado Especial en la capital del Reino de Marruecos, Pitshou Mulumba, que reproducimos a continuación:
Un escenario de misterios e historia, el Chellah se destaca como una joya arqueológica en el corazón de Rabat. Con vistas majestuosas al río Bouregreg, este sitio legendario, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es testigo de siglos de civilizaciones entrelazadas, desde los fenicios hasta los merinidas, pasando por la época romana. Entre ruinas imbuidas de carácter sagrado y exuberantes jardines, Chellah ofrece a los visitantes una inmersión cautivadora en el patrimonio cultural y espiritual de Marruecos, mientras resuena como un santuario de paz y encanto atemporal.
Mucho más que un sitio arqueológico, Chellah es un testimonio vivo de la historia, el arte y la cultura de Marruecos a través de los tiempos. Según historiadores y arqueólogos, el sitio de Chellah fue sin duda el asentamiento humano más antiguo en la desembocadura del Bouregreg. Prueba de ello son los numerosos puestos comerciales fundados en las costas mediterránea y atlántica por los fenicios y cartagineses.
Situada sobre una colina que domina el río, la necrópolis de Chellah es un lugar mágico rodeado de mil misterios. Apenas traspasada la gran puerta octogonal meriní, el visitante se sumerge en un mundo mágico donde conviven maravillosamente los restos de los imperios romano y meriní. Un largo y agradable camino empedrado, bordeado de diversos árboles y flores fragantes, da la bienvenida al visitante.
Es uno de los sitios arqueológicos más fascinantes de Marruecos. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2012, constituye un rico testimonio de la historia de la región, mezclando restos romanos e islámicos medievales en un entorno natural encantador.
Orígenes romanos: Chellah, conocida en la época romana como Sala Colonia, fue un importante puesto comercial y puerto fluvial en la provincia romana de Mauritania Tingitane. Después de que el sitio fuera abandonado por los romanos, fue redescubierto y transformado por dinastías musulmanas. Los meriníes en el siglo XIV, en particular el sultán Abu al-Hassan, la convirtieron en una necrópolis real, construyendo mezquitas, santuarios y morabitos.
Se pueden admirar fragmentos de columnas, pilas de agua e inscripciones en latín. Estos restos dan testimonio del papel de Sala Colonia como centro urbano y administrativo. Un imponente muro de piedra, con una majestuosa puerta de entrada, rodea el lugar. Esta fortificación refleja la arquitectura típica mariní. El sitio contiene tumbas de sultanes mariníes y santos locales, a menudo decoradas con inscripciones caligráficas y diseños geométricos.
Chellah es un remanso de paz, famoso por sus exuberantes jardines, buganvillas y naranjos.
El sitio alberga regularmente eventos culturales, como conciertos de música durante el Festival Mawazine, donde su ambiente único ofrece una experiencia excepcional. / Par: Pitshou Bombay