“Un sistema tan generoso”. Tras una audiencia en cada una de las comisiones jurídicas del Parlamento, el director general de la Oficina francesa de Inmigración e Integración (Ofii) Didier Leschifue reelegido para un cuarto mandato al frente de la administración.
En las próximas semanas, el desafío para la Ofii, bajo la supervisión del Ministerio del Interior, será asegurar la aplicación de la Ley de inmigración promulgada a finales de enero de 2024.. Más concretamente sobre el acceso a un permiso de residencia sujeto a un nivel de idioma A2 y a un examen cívico.
Según lo informado por nuestros colegas de Public SénatEL problemas de salud y el vacunación constituyen, a largo plazo, dos temas importantes para Didier Leschi. Y para indicar que “La inmigración merece una reflexión que vaya más allá de los puntos de vista morales”.
Delante de él, el diputado de Tarn-et-Garonne Brigitte Barègesdenunció el procedimiento de admisión a estancia para recibir atenciónque permite a un extranjero residente en Francia y gravemente enfermo obtener, bajo condiciones, un permiso de residencia para recibir tratamiento.
Este sistema tan generoso pone de relieve dos abusos: por un lado, la utilización indebida de motivos de salud en los expedientes de inmigración y, por otro, el desarrollo de una forma de turismo médico”, subrayó el ex alcalde de Montauban.
“Esta generosidad ilimitada es insoportable”
Desde el 1 de enero de 2017, el servicio médico de la Ofii tiene competencia para dar un dictamen médico al prefecto como parte del procedimiento de admisión a estancia para recibir atención.
En la práctica, si el estado de salud de un extranjero residente en Francia o su hijo necesita asistencia médica, podrá, tras un examen realizado por el prefecto, beneficiarse de una permiso de residencia para cuidados.
¿Qué debo hacer para ser admitido en esta estancia de tratamiento? Basta que un extranjero invoque la imposibilidad de recibir tratamiento en su país para solicitar un tratamiento gratuito en Francia”, afirmó la diputada de la UDR Brigitte Barèges.
Sin embargo, según la Ofii, el extranjero puede obtener un permiso de residencia para cuidados si su estado de salud lo requiere atención médica de emergencia y que en el país de donde viene, no podría beneficiarse efectivamente de un tratamiento adecuado.
El extranjero deberá además acreditar su residencia habitual en Francia durante al menos un añosu estado civil, su nacionalidad y no representar una amenaza al orden público. En este caso, la prefectura podrá negarse a expedir el título.
Para el ex alcalde de Montauban, este dispositivo representa una “deriva” desconocida para el público en general. Aunque el número de títulos emitidos ha disminuido (3.280 en 2022 frente a 4.400 en 2021), estima que “alrededor de 22.000 personas recibieron/renovaron”.
Los franceses no pidieron nada pero tienen que pagar. Así, más de 100 nacionalidades en todo el mundo se benefician de la generosidad de un sistema que se ha vuelto completamente loco, en primer lugar los argelinos, cuyo gobierno no pierde la oportunidad de expresar comentarios poco elogiosos sobre Francia, pero también sobre los estadounidenses, sobre los Emiratos”, argumentó el funcionario electo.
De hecho, las nacionalidades más representadas entre los beneficiarios incluyen argelinosEL marfileñosEL congoleñoEL camerunésEL georgianosEL guineanosEL malienses y el Comoranos.
Además, Casi seis de cada diez enfermedades se deben a enfermedades crónicas relacionadas con el estilo de vida (diabetes, hipertensión, obesidad, etc.) y trastornos de salud mentalindica Ofii en un informe de 2018.
Mientras “Francia ha ido demasiado lejos en su generosidad”Brigitte Barèges critica también una Inequidad hacia los ciudadanos franceses que a veces encuentran dificultades para acceder a la atención..
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