Este viernes, al final de la tarde y de la noche del viernes al sábado, en Languedoc e incluso en Rosellón, se esperan chubascos tormentosos, a veces fuertes. Hérault y Aude están bajo vigilancia amarilla por lluvias, inundaciones y tormentas, y los Pirineos Orientales y Gard están bajo vigilancia amarilla por tormentas este viernes.
Este viernes 8 de noviembre de 2024, Météo France puso en alerta amarilla varios departamentos del sur de Francia debido a condiciones meteorológicas potencialmente peligrosas. Se trata de los departamentos de Hérault, Aude, Pirineos Orientales y Gard. Esta alerta amarilla se refiere principalmente a los riesgos de fuertes lluvias, tormentas e inundaciones localizadas.
Los departamentos de Hérault y Aude están en alerta amarilla por riesgo de lluvias intensas e inundaciones, así como de tormentas eléctricas, mientras que los Pirineos Orientales y Gard están en alerta amarilla únicamente por tormentas eléctricas. Las previsiones indican que estas perturbaciones podrían intensificarse a última hora de la tarde y durante la noche del viernes al sábado, principalmente en las regiones de Languedoc y Rosellón.
Herault y Aude
Los Pirineos Orientales y el Gard
Se esperan precipitaciones intensas
Las tormentas previstas para el final del día y la noche podrían ser especialmente intensas, con precipitaciones acumuladas que oscilarán entre 80 y 100 mm en apenas unas horas. Estas cantidades de agua en un corto período de tiempo plantean un mayor riesgo de inundaciones repentinas e inundaciones. En determinados casos, las precipitaciones podrían incluso superar estos valores, lo que podría justificar una mayor vigilancia.
La situación para el sábado.
Tras esta primera fase de precipitaciones, las condiciones meteorológicas podrían empeorar aún más, con riesgo de empeorar la vigilancia en el noreste de Córcega (departamento 2B) durante la jornada del sábado. Se esperan importantes acumulaciones de lluvia, que pueden generar advertencias adicionales. Las autoridades aconsejan vigilar la situación meteorológica, que podría cambiar rápidamente.
El pronóstico del tiempo para este viernes
En todo el país, las condiciones climáticas varían. En la mitad norte, el día comienza bajo nieblas grises y matinales, especialmente en los valles del Ródano y del Garona. A medida que avance la mañana, deberían aparecer algunos claros en estos valles, pero el cielo permanecerá nublado al norte del Loira y en el valle del Saona.
En el sur, el sol predomina en general, aunque un velo de nubes se extiende sobre Nueva Aquitania, presagio del deterioro nocturno. En el Golfo de León, las lluvias sostenidas están empezando a afectar a Languedoc-Rosellón y se espera que se intensifiquen durante la noche. Estas precipitaciones podrían convertirse en tormentas. En Córcega se esperan tormentas en la parte oriental de la isla.
Durante la noche, se espera que una perturbación lluviosa procedente del Atlántico llegue a Aquitania, con posibles tormentas en las zonas costeras. El viento de Autan seguirá soplando en la región del Lauragais, alcanzando rachas de hasta 60 km/h.
Temperaturas
Las temperaturas nocturnas se mantienen frescas, pero positivas, en el norte de Francia, con valores entre 2 y 5 grados en Alta Francia y Gran Este. En el centroeste, en Borgoña-Franco Condado, Lemosín, Auvernia-Ródano-Alpes y en el interior de la región PACA, varían entre 4 y 7 grados. La costa mediterránea y las regiones bajo la influencia del viento de Autan registran valores más suaves, entre 12 y 15 grados.
Durante el día, se esperan temperaturas más frescas (entre 8 y 10 grados) en Alta Normandía, Alta Francia, el norte del Gran Este y el norte de la región parisina. Más al sur, en un eje que se extiende desde Baja Normandía hasta el Franco Condado, las temperaturas oscilarán entre 12 y 14 grados, mientras que en el suroeste subirán a 19 o 21 grados.
Llamado a la vigilancia
Las autoridades locales y meteorológicas aconsejan a los residentes que permanezcan atentos y tomen precauciones ante el riesgo de tormentas eléctricas y precipitaciones intensas.
¿Qué es una tormenta?
Una tormenta es un fenómeno atmosférico caracterizado por relámpagos y truenos. Siempre va ligada a la presencia de una nube tipo cumulonimbus, también llamada nube tormentosa, y suele ir acompañada de un conjunto de fenómenos violentos: ráfagas de viento, lluvias intensas, a veces granizo, trombas marinas y tornados.
El cumulonimbus es una nube de 5 a 10 km de diámetro, muy desarrollada verticalmente, que puede elevarse hasta 16 km de altitud. En su cima, el cumulonimbus se extiende ampliamente, lo que le da su forma general de yunque.
Una tormenta siempre puede ser peligrosa en un punto determinado, por la potencia de los fenómenos que produce.
La tormenta es generalmente un fenómeno de corta duración, que dura desde unas pocas decenas de minutos hasta unas pocas horas. Puede ser aislada (tormenta cerca de relieves o provocada por el calentamiento del suelo en verano) u organizada en una línea (llamada “línea de turbonada” por los meteorólogos). En determinadas condiciones, las tormentas pueden regenerarse, siempre en el mismo lugar, provocando fuertes precipitaciones durante varias horas, provocando inundaciones catastróficas.
Los peligros
Relámpago es el nombre que recibe el destello de un relámpago cuando impacta contra el suelo. Esta intensa descarga eléctrica puede matar a un hombre o un animal, quemar un árbol o provocar incendios.
Las intensas lluvias que acompañan a las tormentas eléctricas pueden provocar inundaciones repentinas devastadoras. Un cumulonimbus de 1 km de ancho por 10 km de alto contiene 1 millón de litros de agua.
El granizo, precipitación formada por pequeños trozos de hielo, puede arrasar un viñedo o un huerto en apenas unos minutos.
El viento bajo un cumulonimbus sopla en ráfagas violentas de hasta unos 140 km/h y cambia con frecuencia de dirección. Más raramente, se crea un torbellino muy devastador, el tornado, bajo la base de la nube.