Este martes 5 de noviembre, una cuarentena de agricultores se reunieron ante el tribunal de Béziers para apoyar a un agricultor de Saint-Gervais-sur-Mare, juzgado por violencia con arma tras atropellar el coche de los ladrones de combustible. El agricultor, exasperado por los repetidos robos, fue condenado a una multa suspendida de 1.000 euros.
Un acto de desesperación ante los robos repetitivos
El pasado mes de mayo, tras otro robo de combustible en su finca, el granjero persiguió a los ladrones en un coche. En una curva, golpeó sin querer el vehículo de los sospechosos, que acabó en la cuneta. A pesar de las pruebas aportadas contra los ladrones, estos presentaron una denuncia que condujo a la condena del granjero. “Es un hombre al límite y no tiene lugar al timón”, declaró Jérôme Despey, presidente de la Cámara de Agricultura de Hérault, lamentando que se persiga así a una víctima.
Una red de alerta para los agricultores víctimas de robo
Ante el aumento de los robos de combustible, equipos agrícolas y productos cultivados, se firmó un acuerdo entre la gendarmería y los agricultores para establecer una red de alerta. En Hérault, como en el resto de Francia, las granjas son atacadas periódicamente, a pesar de las costosas medidas de seguridad implementadas por los agricultores para proteger sus propiedades.
“Me avisaron gracias a las cámaras”
“He presentado numerosas denuncias por robo de combustible y de equipos”, declaró el agricultor a France Bleu. Gracias a las cámaras instaladas en su finca, fue alertado de la presencia de ladrones el pasado mes de mayo. Cuando intervino, persiguió a los intrusos en coche y alertó a la policía. “En una esquina oscura, no vi su auto y los golpeé; No fue intencional”, explicó.
Fuente: Le Midi libre
(Gracias Yann Bourguignon)
Más información sobre
Suscríbete para recibir las últimas publicaciones en tu correo electrónico.
France