El centro hospitalario de Guayana Occidental inaugura un mamógrafo de última generación, el GE Prestina, que ofrece exámenes de alta precisión y un entorno diseñado para el bienestar de los pacientes. Este nuevo dispositivo, de última tecnología, podría triplicar la capacidad de detección del establecimiento.
Un soplo de modernidad está llegando a las salas de radiología de los guyaneses occidentales. Con el nuevo mamógrafo GE Prestina, los exámenes adquieren otra dimensión, combinando innovación y comodidad para los pacientes. Atrás quedó el viejo modelo, envejecido y limitado en sus funciones: este nuevo equipo ofrece precisión quirúrgica, permitiendo exámenes como la termosíntesis, la angiomamografía e incluso biopsias. Opciones que, hasta ahora, eludieron a los pacientes de la región.
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©Eric LEÓN
Pero la innovación no se limita a las características técnicas. Rodolphe Pelonde, responsable sanitario del sector de imágenes médicas, explica que la sala fue diseñada para calmar a los pacientes, a menudo estresados por el examen. Gracias a una atmósfera inmersiva con imágenes relajantes y sonidos envolventes, este espacio está diseñado para transformar un momento de ansiedad en una experiencia más serena. “Es una gran ventaja para nuestros pacientes”subraya, convencido de los beneficios de un ambiente relajante.
¿El desafío? Pasar de 200 exámenes anuales a 400, incluso 600respondiendo a las crecientes necesidades de la población. Aunque este objetivo pueda parecer ambicioso, el centro hospitalario apuesta por la capacidad de este nuevo dispositivo para multiplicar por diez la eficacia de sus cribados. Este mamógrafo, muy utilizado en los hospitales de Francia continental, encarna el compromiso del centro hospitalario por una asistencia más moderna y precisa, donde cada paciente se beneficie de lo mejor en términos de diagnóstico y bienestar.
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