La ciudad de Quebec ha acordado con la Société de l’assurance automóvil du Québec fijar el importe de este nuevo impuesto a más tardar el 15 de septiembre, para su aplicación en enero de 2025.
Inicialmente, las ciudades tuvieron que decidir sus intenciones de implementar un impuesto de matriculación antes del 31 de mayo.
El alcalde Bruno Marchand, sin embargo, hizo campaña a favor de una prórroga de este plazo, que consideraba demasiado ajustado. La incertidumbre relacionada con las ayudas gubernamentales y otras entradas de dinero para equilibrar el presupuesto de la Red de Transportes de la Capital (RTC) no le permitió determinar una cantidad precisa, afirmó.
Por lo tanto, la ciudad de Quebec adoptará un reglamento antes de fin de mes, confirmando su deseo de imponer una contribución adicional de los automovilistas a la financiación del transporte público.
“Para ello se tendrán en cuenta las auditorías de gestión ordenadas por el Gobierno, los debates sobre los déficits de las empresas de transporte y el futuro de la movilidad en la Capital Nacional”, explica la administración Marchand.
Mientras tanto, la solicitud de la Ciudad debía ir acompañada de una “cantidad provisional” de 10 dólares hasta que “se aclaren las visiones del gobierno y de la Ciudad sobre el transporte público antes incluso de hablar de la variable financiera”.
“Esta cantidad se establece con carácter preliminar. El acuerdo entre la Ciudad y la SAAQ prevé que el monto podrá ser revisado antes del 15 de septiembre de 2024, antes de la aplicación prevista para el 1 de enero de 2025”, se especifica.
La notificación de la moción de reglamento aparecerá en el orden del día del consejo municipal del martes.
Las ciudades de Lévis, Saint-Augustin-de-Desmaures y L’Ancienne-Lorette ya han anunciado que no tienen intención de imponer un impuesto adicional a la matriculación en sus respectivos territorios.
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