El 27 de septiembre de 2024, en Cerdeña, Carla Mosti se coronó campeona europea junior de resistencia ecuestre individual. Una historia familiar…
El 27 de septiembre, en Cerdeña, Carla Mosti, de 19 años, se proclamó campeona europea junior individual de resistencia ecuestre. Donde la historia es (aún más) hermosa es que hace 27 años, en 1997, su madre, Cécile Miletto, se coronó campeona de Europa por equipos juveniles, en Inglaterra.
”De hecho, siento que estoy en el mismo viaje que mi madre.Sonrió Carla, agradecida. Estoy feliz porque significa que ella me transmitió sus genes ganadores (sic). Además, no hace mucho supe que ella había hecho el mismo viaje, a la misma edad”.
Liderando de principio a fin
Del lado de Mas d’Armani, en Saint-Gilles, el círculo está un poco completo, digamos. Porque, de hecho, los bucles fueron el tema de este Campeonato de Europa en Cerdeña.
Las cuatro del programa, en este recorrido de 120 km, Carla Mosti acabó en cabeza, dejando a la competición española a 1 minuto de distancia.
‘“Durante los últimos kilómetros estábamos en la carretera y los coches podían seguirnosexplica la flamante campeona de Europa y… medallista de plata por equipos (España, 1ª), ella que, en el mejor de los casos, no pudo hacer su primera selección para la selección francesa. Ahí ya me había adelantado y me dije: “Pero no, yo soy el primero”. (sorpresa)…””
Gino D’Armani… cierto au Pero
Si Carla había hecho el trabajo en el campo, su caballo, Gino D’Armani, un macho de 8 años nacido… en el Mas, todavía tenía que pasar el control veterinario final.
Y allí, con evidente tensión, Saint-Gilloise esperaba el veredicto de los jueces, recordando su desventura en junio en las selecciones de Francia en esta Eurocopa, en Compiègne: “Terminé el último bucle en un sprint. El problema es que Gino tenía 65 pulsaciones/minuto. (límite permitido, 64) durante la última prueba y quedé eliminado. No quería volver a cometer el mismo error”.
Esta vez, Gino D’Armani, a 58 pulsaciones/minuto, todavía tenía algo en su haber. Carla Mosti pudo entonces dejar estallar su alegría. Y continuar con la tradición familiar…