Al igual que en las ediciones de 2019 y 2021 de la Liga de Naciones, Bélgica comenzó su campaña con una victoria… en casa. El afortunado gol del empate de Israel no pudo con el impulso ofensivo de Bélgica. A pesar de un penalti fallado por Openda, pero gracias a un doblete de De Bruyne y un gol de Tielemans, los Devils controlaron el partido antes de viajar a Francia, donde fueron sorprendidos por Italia (1-3).
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Publicado el 06/09/2024 a las 23:05
Tiempo de lectura: 3 min
BUn regreso al futuro. Y cuatro años atrás para los Diablos que, en plena pandemia, se oyeron jugar en estadios transformados en catedrales de hormigón con sonidos huecos. En una atmósfera idéntica se disputó anoche en el Estadio Nagyerdei de Debrecen el primer partido que Bélgica jugó en casa fuera de sus fronteras (excluyendo los grandes torneos, por supuesto). En un extraño ballet de fantasmas que parecían deambular en un íntimo concierto de sonidos insólitos, los jugadores belgas llevaron su soledad con una profesionalidad que nunca falló. Si bien, lógicamente, les llevó el cuarto de hora académico tomar posesión real del lugar, impusieron un control de las operaciones que el joven equipo israelí, en plena mutación entre dos generaciones, nunca fue capaz de disputar en un primer momento.
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