Para el Día Mundial del Libro, la marca suiza Exlibris actualizó una tecnología algo retrofuturista, el holograma. Este último había experimentado un resurgimiento del interés con su uso por parte de un determinado candidato durante una campaña presidencial francesa, y esta vez se encuentra puesto al servicio de los libros y de la lectura.
Este sistema formaba parte de un rico programa, que incluía, en particular, un maratón de lectura, repartido en 24 horas. Esta “Lesathon” reunió a una treintena de autores y personalidades diversas, unidos por el amor a la lectura y el deseo de declamar textos durante varias horas.
Paralelamente a una retransmisión en la plataforma YouTube, esta importante lectura conjunta se mostró en varios dispositivos holográficos alquilados por la cadena de librerías a la empresa suiza Jamazeespecialista en ” experiencias inmersivas en 3D“.
Los dispositivos se instalaron en cinco lugares diferentes, repartidos en tres ciudades suizas: la Universidad de Ciencias Aplicadas y el Blue Cinema de Chur, la Universidad de Medicina y el Blue Cinema de Zurich y, finalmente, el centro comercial Glatt en Wallisellen.
En un momento en que las librerías cuestionan su huella de carbono, o incluso su participación en una industria del libro libre y plagada de sobreproducción, el uso de tales dispositivos tecnológicos puede resultar sorprendente.
La cadena de librerías Exlibrisinterrogado sobre este punto por correo electrónico, nos dice que el consumo eléctrico de los dispositivos es alrededor de 300 a 400 vatios, a priori por hora, según la información proyectada. Lo que corresponde a la potencia de una computadora de escritorio de alto rendimiento utilizada para videojuegos.
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Es posible volver a ver ciertas lecturas a continuación, aunque de una manera menos inmersiva…
Fotografía: Holograma de Serafina Haldimann, quien estaba leyendo el volumen 1 dePercy Jacksonpor Rick Riordan
