¡Una carnicería! El divorcio entre Antoine y Margaux es un verdadero dolor de cabeza para el juez y para el lector. Éliette Abecassis ha decidido poner al lector en la incómoda posición de quien debe juzgar a Salomón… ¿Cómo tomar la decisión correcta? El que mejor salvará a los niños, cuando una pareja se desmorona y da un testimonio ante los tribunales tan contradictorio como verosímil. No hay diálogos en este libro, sólo testimonios, cartas, actas en las que cada uno cuenta su versión de la historia de amor, si la hubo, entre Antoine, cirujano, y Margaux, novelista. La madre, el padre, el hermano, el amigo, el amante, el editor, la segunda esposa, la niñera, cada vez que el lector cree comprender una verdad, un nuevo testimonio distorsiona su juicio.
¿Está loca? ¿Es un pervertido manipulador? ¿Quién es infiel? ¿Quién utiliza a los niños? ¿Quién inventa? ¿Quién es sincero? En este torbellino de versiones, es difícil separar lo verdadero de lo falso, todas y cada una son creíbles y sin embargo todo se contradice… Una novela que analiza un proceso despiadado, una familia rota, una sociedad que ya no sabe qué que ver con estas parejas que destrozan a los niños. Señala la misión imposible de la justicia. Y, sin embargo, siempre hay algo o alguien a quien salvar entre las ruinas de un antiguo amor… Una novela de la que salimos desestabilizados.
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