Según se informa, Hezbolá “clonó” un misil israelí que ahora usaría contra el Estado judío.

He aquí por qué los militares tienen cuidado de nunca dejar intactos equipos de última generación. Según el New York Times que entrevistó a funcionarios de defensa israelíes y occidentales, así como a expertos en armas, Irán ha logrado en los últimos años «clonador» un misil antitanque israelí, para producirlo en masa y suministrarlo a Hezbolá, que actualmente lo utiliza contra Israel. El sistema original llamado Spike, compuesto por un lanzador y varios misiles, fue abandonado durante la anterior guerra del Líbano en 2006.

Dieciocho años después, esta arma se vuelve contra su diseñador. Para reproducir el misil, Irán debe haber utilizado ingeniería inversa, que implica diseccionar un sistema para comprenderlo y posiblemente reproducirlo sin un conocimiento inicial de cómo funciona y fue diseñado. Este proceso es tan antiguo como la guerra, incluso para Irán, que ya ha reproducido drones y misiles estadounidenses, recuerda el New York Times.

Un arma poderosa

Inicialmente diseñado por la autoridad armamentista israelí Rafael, el Spike, en manos de terroristas libaneses, se convirtió en el Almas, que significa “diamante” en persa. Varios de estos misiles han sido descubiertos por el ejército israelí desde que lanzó su operación militar en el Líbano hace dos meses. Formaban parte de un arsenal de armas mucho más primitivas, como los misiles antitanque Kornet, de diseño ruso.

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El Almas, ex-Spike, supera tecnológicamente a muchos misiles de Hezbolá. Equipado con un detector térmico incorporado, ataca a sus objetivos con una trayectoria balística, lo que le permite atacar a los tanques desde arriba, donde son más vulnerables, y no desde un lado. El misil puede llevar dos tipos de ojivas: una explota en dos fases, lo que facilita la penetración del blindaje, y la otra explota en una bola de fuego. Hay al menos tres variantes conocidas de los misiles Almas, según el Centro de Investigación y Educación Alma, un centro de investigación israelí citado por el New York Times. Lo que demuestra que Irán es capaz de desarrollar el arma que “robó”. También estaría activa una cuarta versión.

Si estas armas clonadas fueron detectadas durante la reciente operación militar israelí en el Líbano, los servicios de inteligencia israelíes aseguran a nuestros colegas que se han utilizado durante mucho más tiempo. Los misiles Almas se utilizaron así durante la guerra civil en Siria, que comenzó en 2011. A partir de ahora, según las mismas fuentes, Irán fabricaría directamente estos proyectiles en el Líbano, para acortar la cadena de producción. Pero la República iraní conservaría la producción de determinados misiles para equipar a su propio ejército.