El gobierno federal anunció el miércoles nuevas sanciones para “combatir las actividades terroristas” de Hamás y “frustrar sus redes financieras”, así como contra los colonos israelíes “extremistas” que han cometido “actos de violencia” contra civiles palestinos en Cisjordania ocupada.
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Ottawa también agregó, “en coordinación” con Australia y Estados Unidos, a cinco altos funcionarios iraníes a su lista de sanciones por su papel en la promoción de “políticas represivas y discriminatorias” que llevaron a la violenta represión de las protestas.
Las sanciones fueron anunciadas para conmemorar los dos años de la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una mujer kurda iraní de 22 años arrestada por la policía moral por violar el estricto código de vestimenta de Irán para las mujeres.
Las nuevas sanciones también apuntan a 11 personas y dos entidades que desempeñaron un papel en la red financiera de Hamás, un movimiento islamista palestino, que según Ottawa fue utilizado en la planificación y ejecución de ataques contra Israel a partir del 7 de octubre de 2023.
Cuatro israelíes, así como las organizaciones Mount Hebron Fund y Shlom Asiraich, también fueron incluidos en la lista por “participar en actos de acoso y violencia, incluidos ataques a convoyes humanitarios, despojo de propiedades y desplazamiento de comunidades palestinas”, según un comunicado del gobierno.
Las sanciones se implementaron cuando el primer ministro Justin Trudeau se reunió el miércoles con el jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, emir de Qatar, quien actúa junto con Egipto y Estados Unidos como mediador entre Israel y Hamas, que han estado en guerra durante casi un año.
Según un informe de su reunión en Ottawa, Trudeau expresó “profunda preocupación por el riesgo de una extensión del conflicto entre Israel e Irán, así como con el Hezbolá (libanés) y otros grupos alineados con Irán”.
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