¿Groenlandia pronto será estadounidense? Según las declaraciones del hombre que ocupará la Oficina Oval en Washington dentro de cuatro semanas, está dentro de lo posible, al igual que recuperar el Canal de Panamá o anexar Canadá para añadir una estrella a la bandera estadounidense. Donald Trump, acostumbrado a hacer declaraciones radicales, ya había hecho este tipo de declaraciones durante su primer mandato.
“Groenlandia es nuestra”
“Para la seguridad nacional y la libertad en todo el mundo, los Estados Unidos de América creen que la propiedad y el control de Groenlandia lo convierten en una necesidad absoluta”.escribió el republicano el domingo 22 de diciembre en su red Truth Social, sin especificar qué quiso decir con eso. “Groenlandia es nuestra”respondió al día siguiente el primer ministro de Groenlandia, Mute Egede. “No estamos en venta y nunca lo estaremos. No abandonaremos nuestra larga lucha por la libertad”escribió en Facebook, añadiendo sin embargo que “Debemos permanecer abiertos a la cooperación y al comercio internacional, particularmente con nuestros vecinos”.
Donald Trump aún no ha comenzado su presidencia, pero ya tenemos la vaga impresión de una nueva versión de una mala película. Porque Donald Trump ya había hecho tal declaración en 2019. Durante su primer mandato, había considerado abiertamente la compra por parte de Estados Unidos de este territorio ártico, evocando una potencial “gran transacción inmobiliaria” quien seria “estratégicamente interesante”. El asunto provocó una crisis diplomática con Dinamarca, miembro de la OTAN y a la que está adscrito este territorio helado, cuatro veces más grande que Francia.
Incluso si realmente lo quisiera, Donald Trump no podría adquirirlo. Este territorio, nevado la mayor parte del año, poblado por sólo 56.609 habitantes (según estadísticas de enero de 2023), es la isla más grande del mundo. Los pueblos inuit llegaron allí en el siglo XIII. Colonizada por primera vez por el Reino de Noruega alrededor de 1262, fue cedida a Dinamarca en 1814, convirtiéndose en una de sus colonias y luego en parte de la comunidad del Reino de Dinamarca en 1953 según la Constitución de ese país.
Autonomía muy fuerte en Groenlandia
En 1979, Dinamarca concedió autonomía interna a Groenlandia, y el 25 de noviembre de 2008, los groenlandeses votaron en referéndum consultivo con un 75% a favor de una autonomía reforzada. El Parlamento danés aprobó entonces una ley en este sentido, promulgada en mayo de 2009. Dinamarca cedió 32 competencias a su antigua colonia, incluidas las de la policía y la justicia. Pero la política monetaria, la defensa y la política exterior siguen bajo control danés.
El problema actual para Estados Unidos es sobre todo militar. La base Thule ha sido un eslabón importante en la cadena de radares del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (NORAD), diseñado para detectar posibles lanzamientos de misiles balísticos desde Eurasia, desde el comienzo de la Guerra Fría, y una estación de monitoreo satelital del Comando Espacial de la Fuerza Aérea. Y, en 1962, el presidente John Kennedy, consciente de la importancia de este territorio, declaró: “Quien es dueño del Polo, es dueño del mundo. »