La famosa Fontana de Trevi ha reabierto oficialmente después de una limpieza de semanas. El municipio ha decidido limitar ahora el número de visitantes a 400 a la vez, anunció el domingo el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri.
“Aquí pueden estar 400 personas a la vez (…) y el objetivo es que todos puedan disfrutar de la fuente, sin aglomeraciones ni confusiones”, declaró Gualtieri ante este monumento famoso por la película ” La dolce vita’.
Añadió que este número podría modificarse al final de una fase de prueba cuya duración no especificó.
El alcalde de la capital italiana indicó también que el municipio estudiará en los próximos meses la posibilidad de introducir ‘un pequeño billete de entrada’ para financiar, entre otras cosas, el mantenimiento de la fuente.
Claudio Parisi Presicce, responsable del Patrimonio Cultural del Ayuntamiento, declaró a la AFPTV que las obras en los monumentos de Roma, incluida la Fontana di Trevi, se realizaron de forma que “devolvieran a la ciudad la mayoría de los monumentos en condiciones útiles”. Es hora del inicio del Jubileo de la Iglesia Católica que comienza el 24 de diciembre.
‘El trabajo duró tres meses, con un enorme esfuerzo global que nos permitió cerrar los sitios antes (…). Es un trabajo capilar de limpieza, eliminación de elementos de degradación, malas hierbas, incrustaciones calizas, que ha dado frutos excepcionales’, añadió.
Esta obra maestra barroca construida sobre la fachada de un palacio es uno de los sitios más populares de Roma, que se hizo famosa por ‘La Dolce Vita’, una película de Federico Fellini, en la que Anita Ekberg invita a Marcello Mastroianni a unirse a la fuente.
10.000 euros por semana
La ceremonia de este domingo se desarrolló bajo una ligera lluvia, en presencia de varios centenares de turistas, muchos de los cuales imitaron al alcalde, arrojando una moneda a la fuente.
Tradicionalmente, los numerosos turistas, hasta ahora entre 10.000 y 12.000 por día, lanzan allí monedas, lo que supuestamente trae buena suerte.
Normalmente, las autoridades recuperan cada semana unos 10.000 euros, pagados a la organización caritativa Cáritas para financiar comidas para los pobres.
/ATS