El sábado por la tarde se produjo un incendio forestal en el monte Parnitha, cerca de Atenas, mientras las autoridades advirtieron sobre los riesgos muy elevados de que se produjeran incendios de este tipo en seis regiones de Grecia. En toda Grecia se han producido desde el amanecer un total de cuarenta incendios forestales, según anunciaron los bomberos.
Actualmente se están enviando refuerzos desde otras partes del territorio griego para ayudar a controlar la catástrofe en los alrededores de la capital, según informó a la prensa el portavoz de los bomberos, Vasilis Vathrakogiannis.
“En general, las condiciones imperantes son difíciles y peligrosas”, subrayó. Además de la velocidad del viento, que en ocasiones supera los 100 km/h, la densidad de las torres de alta tensión también dificulta la intervención de los aviones de extinción de incendios, de los que sólo hay cuatro. Por lo tanto, actualmente trabajan principalmente doce helicópteros, añadió Vathrakogiannis.
El portavoz también elogió la contribución de los numerosos bomberos voluntarios presentes en el lugar, así como los camiones cisterna de agua proporcionados por la región de Ática, donde se encuentra Atenas, y el estado mayor del ejército.
Por el momento, los vientos no parecen soplar hacia las zonas residenciales, propagando las llamas hacia una zona del monte Parnitha que ya ha sido quemada durante catástrofes anteriores. La jornada del sábado comenzó en el sector forestal de Katsimidi. Sin embargo, las fuertes ráfagas enviaron humo hacia el centro de la capital griega, donde se percibe un olor a madera quemada.
“Ya no hay un frente activo” en Katsimidi “pero la lucha aún no ha terminado, aunque la situación haya mejorado”, aseguró por la tarde el ministro de Crisis Climática y Protección Civil, Vasilis Kikilias.
Según las previsiones de su ministerio para el domingo, la región del Ática, el sur de la península del Peloponeso, la isla de Creta, el norte y el sur del mar Egeo y el centro de Grecia enfrentan un riesgo de incendio muy alto (categoría 4). El sábado por la tarde también se produjo un incendio forestal a 20 kilómetros al noroeste de Atenas, mientras que otro en la ciudad de Keratea, en el este del Ática, fue controlado por las autoridades que habían evacuado dos pueblos.
Acostumbrada al calor tórrido del verano, Grecia se prepara desde hace semanas para una temporada especialmente difícil en materia de incendios. Después del invierno más caluroso de su historia, este país experimentó la semana pasada su primera ola de calor, con temperaturas que superaron los 44°C en algunas regiones. En 2023, a una ola de calor de dos semanas le siguieron devastadores incendios forestales que dejaron 20 muertos.
