El presidente del Centro, Gerhard Pfister, pide un acercamiento con la OTAN tras las elecciones en Estados Unidos. Ciertos anuncios de Donald Trump podrían tener una influencia negativa en la seguridad de Suiza, opina en una entrevista concedida al periódico NZZ el domingo. Gerhard Pfister se muestra convencido de que la cooperación con la Alianza Atlántica es el camino correcto en esta situación, pero “siempre respetando estrictamente la neutralidad”. Suiza no enviaría soldados a ninguna parte.
“No quiero unirme a la OTAN”, afirmó Gerhard Pfister. Pero consultar con los Estados de la alianza es para él lo mínimo absoluto. Así, los aviones de combate suizos F-35 podrían integrarse en el futuro en la defensa europea en caso de guerra, aunque “por supuesto no estarán en el frente”. Suiza podría asumir tareas de vigilancia aérea para aliviar a los europeos.
Porque si el ex y futuro presidente estadounidense cumple su palabra, esto será peligroso para Europa: “Si quiere establecer una paz rápida en Ucrania como anunció, será una paz similar a la de Rusia”, estimó el presidente de el Centro. Cuando se le preguntó si no sería mejor para Suiza mantenerse alejada, respondió: “Entonces debemos dejar claro a la OTAN que estamos dispuestos y somos capaces de defendernos completamente si es necesario. Con la actual capacidad de defensa del ejército, hay grandes interrogantes para mí”.
Situación peligrosa para Europa
La consejera nacional (UDC/GR), Magdalena Martullo-Blocher, quiere avanzar en la cuestión del libre comercio con los Estados Unidos, el segundo socio comercial de Suiza después de la Unión Europea. “Por supuesto que debemos reanudar las negociaciones inmediatamente”, declaró el jefe de Ems-Chemie en el periódico dominical “Me comprometeré personalmente con ello”. Según ella, el acuerdo de libre comercio con Estados Unidos es el más importante que aún falta. Durante el primer mandato de Trump, se llevaron a cabo discusiones entre los dos países. Pero la llegada al poder de Joe Biden puso fin a esta exploración. La asociación económica Swissmem también pide a la Confederación que reanude estos debates “lo antes posible”. Estados Unidos es el socio comercial más importante de Suiza después de la UE.
El consejero federal Guy Parmelin es más matizado al respecto. “Podría ser útil hacer un nuevo análisis”, dijo en una entrevista con Domingo por la mañana. “Para nosotros, el gran desafío es la agricultura. Esto es lo que provocó el fracaso de las últimas conversaciones, continúa. El problema es simple: no podemos comer 20 kilos de carne de vacuno al día para absorber las importaciones estadounidenses y la producción suiza. No es aceptable someter a nuestra agricultura a una presión aún mayor, cuando nuestra tasa de autosuficiencia no llega ni al 50%”.