ll inmenso incendio que amenaza la ciudad petrolera de Fort McMurray, en el oeste de Canadá, ganó terreno el miércoles, un día después de la evacuación de más de 6.000 residentes, pero las autoridades esperan un pequeño respiro en las próximas horas.
El incendio duplicó su tamaño en 24 horas bajo la influencia de fuertes vientos, alcanzando casi 21.000 hectáreas y ahora se encuentra a menos de 4,5 kilómetros de la ciudad.
Pero el viento ha amainado y se espera que aleje el fuego de la ciudad y la carretera, dijo Christine Tucker del Departamento de Bomberos de Alberta en una conferencia de prensa.
Sin embargo, las autoridades han pedido a los residentes que estén atentos, ya que las condiciones podrían “deteriorarse rápidamente”.
Situado en Alberta (oeste), Fort McMurray es conocido como el punto crítico de producción de petróleo de Canadá. Esta ciudad de 70.000 habitantes es también el símbolo del mayor desastre natural de la historia del país, en términos de destrucción, tras ser parcialmente arrasada por las llamas en 2016.
“Esta evacuación es un claro recordatorio de que nuestra provincia vive bajo la amenaza de incendios forestales y otros desastres nacionales”, dijo Danielle Smith, primera ministra de la provincia.
“Estoy segura de que esto traerá miedo e incertidumbre a muchos residentes de Fort McMurray”, añadió.
Cuatro barrios del sur de la localidad fueron evacuados el martes y toda la ciudad se encuentra en alerta. Muchas tiendas están cerradas, al igual que algunas escuelas, y el olor a humo ha invadido toda la ciudad.
Cada día, según cifras oficiales del gobierno, se extraen más de 3 millones de barriles de petróleo de las arenas bituminosas de la región, lo que contribuye a que Canadá sea el cuarto productor mundial y el principal exportador de crudo a Estados Unidos.
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