– El oficialismo gana la mayoría en la Asamblea
Las elecciones legislativas del lunes en Togo finalmente dieron su veredicto. Es el partido gobernante del presidente Faure Gnassingbé el que obtiene la mayoría de escaños.
Publicado hoy a las 1:22 am.
En el medio, el presidente Faure Gnassingbé.
AFP
El partido del presidente togolés, Faure Gnassingbé, obtiene la mayoría de los escaños en la Asamblea Nacional tras las elecciones legislativas del lunes, anunció el sábado por la noche la Comisión Electoral de Togo.
Un total de 108 escaños de diputados sobre 113 corresponden al partido presidencial, la Unión para la República (Unir), según los resultados provisionales, anunció el presidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente (Ceni), Dago Yabré, el sábado por la tarde en Lomé, tras una cuenta atrás retransmitida en directo por la cadena de televisión nacional, la tasa de participación fue del 61%, según la Ceni.
Estos resultados, que aún deben ser confirmados por el Tribunal Constitucional, marcan una victoria indiscutible del partido del presidente Faure Gnassingbé, en el poder desde 2005, después de que su padre permaneciera al frente del Estado durante casi 38 años. Esto debería garantizar que siga siendo el dueño del destino de Togo durante al menos los próximos seis años.
El país pasa a un régimen parlamentario
Porque según la nueva Constitución adoptada el 19 de abril por los diputados salientes, el país pasa de un régimen presidencial a un régimen parlamentario. El poder reside en manos del presidente del Consejo de Ministros, que es automáticamente el líder del partido mayoritario en la Asamblea Nacional. Es el caso de Faure Gnassingbé, presidente de Unir.
Esta reforma constitucional ha sido duramente criticada por la oposición togolesa y por organizaciones de la sociedad civil que denuncian un “golpe de Estado institucional” y lo ven como una forma de que Faure Gnassingbé permanezca en el poder. Éste, según la Constitución anterior, sólo podría haberse presentado a un último mandato en 2025.
La oposición afirma que la abolición del sufragio directo para elegir al Jefe de Estado permitirá a éste ser reelegido indefinidamente siempre que su partido gane las elecciones legislativas. Para el partido gobernante, por el contrario, la reforma constitucional hace que las autoridades sean más representativas.
AFP
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