Investigación
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La Liga de Fútbol Profesional está siendo criticada por su gestión de los derechos televisivos, que fueron objeto de un contrato vitalicio muy lucrativo para el fondo de inversión CVC. El relator de la misión de información parlamentaria, el senador Michel Savin, la invitó el jueves a “revisar urgentemente su gobernanza”, tras una redada en sus instalaciones.
El fútbol francés no está en buena forma, acusado de una gestión calamitosa de los derechos de retransmisión televisiva de los partidos, producto del dopaje del negocio del fútbol. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) no es sospechosa de haber vendido su alma al diablo, sino de haber vendido o hipotecado el futuro del fútbol francés. Después de haber prometido mil millones de euros por temporada, Vincent Labrune, presidente de la LFP reelegido para cuatro años el martes 10 de septiembre en condiciones increíbles, con una puntuación de mariscal (86% de los votos), tuvo que tragarse sus ambiciones y vender el campeonato francés por 500 millones de euros a Dazn y BeIn Sports. Desde entonces, el fútbol ha estado en la mira: misión de información parlamentaria al Senado, cuyas múltiples audiencias se parecen ahora a acontecimientos públicos, investigación preliminar abierta por la Fiscalía Nacional Financiera (PNF), que, según nuestra información, lleva casi un año examinando el caso. Sin olvidar el Tribunal de Cuentas, que a su vez podría sumarse al baile. Como símbolo, el senador LR Michel Savin, relator del
