“El recurso que presento ante el TEDH podría, desgraciadamente, llevar a la condena de Francia”, subraya Nicolas Sarkozy, estimando que no habría recurrido a este órgano si se hubiera “beneficiado de un análisis jurídico tranquilo”.
“Se me acusa de haber pensado en ayudar a una solicitud que nunca fue formulada, con una intervención que nunca se realizó, a cambio de un servicio que no fue solicitado ni prestado”, denuncia.
“Todo se basa finalmente en fragmentos de conversaciones entre un abogado y su cliente, esencialmente confidenciales”, añade el ex jefe de Estado.
Sarkozy debe ahora ser citado -en principio en un plazo inferior a un mes- ante un juez de ejecución de penas (JAP), que determinará las condiciones de su brazalete, que se le colocará más adelante.
En este caso, Nicolas Sarkozy fue condenado en primera instancia el 1 de marzo de 2021 y luego en apelación el 17 de mayo de 2023.
El ex inquilino del Elíseo fue declarado culpable de haber firmado un “pacto de corrupción” con Gilbert Azibert, magistrado principal del Tribunal de Casación, en 2014, junto con su histórico abogado Thierry Herzog, para transmitir información e intentar influir en una recurso interpuesto por Nicolas Sarkozy en el caso Bettencourt.
Asunto de las escuchas telefónicas: Sarkozy es condenado definitivamente a un año de brazalete, pero remite el asunto al Tribunal Europeo de Derechos Humanos
Y ello, a cambio de una “ayuda” prometida para un puesto honorífico en Mónaco.
Los tres hombres recibieron la misma sentencia y al abogado se le prohibió vestir túnica negra durante tres años. Sus recursos también fueron rechazados y, por tanto, estas sentencias son firmes.
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