Después de un comienzo de noviembre relativamente suave, se espera que las temperaturas bajen en Francia esta semana debido a un fenómeno llamado “gota fría”. En algunas zonas se esperan nevadas en altitudes medias y altas.
Ante la retirada del anticiclón presente sobre Francia hacia las Islas Británicas, el aire frío debería infiltrarse en Europa central formando una depresión, sinónimo de inestabilidad meteorológica (lluvia y nieve en las montañas). Durante la semana incluso debería aparecer una “gota fría” procedente de Alemania, que provocaría nevadas en las cadenas montañosas.
Una gota fría es una bolsa de aire muy frío situada a más de 5.000 metros de altitud. Cuando la corriente en chorro polar se deforma, sucede que una bolsa, llamada gota fría, se desprende de la circulación asociada a la corriente en chorro polar para descender hasta nuestras latitudes.
Las gotas frías crean áreas de baja presión, que están asociadas con una masa de aire inestable. A menudo provocan alteraciones del tiempo, con chubascos, a veces consistentes en aguanieve que cae hasta el suelo, asociados a fuertes ráfagas de viento. También pueden generar corrientes de aire más suave y húmedo desde el Mediterráneo.
Una gota de agua fría provocó inundaciones históricas en Polonia y Austria a mediados de septiembre, provocando también nevadas tempranas en los Alpes. Desde entonces, la nieve sigue siendo muy escasa. Además, desde el 13 de octubre reina una inusual suavidad, que contribuyó al derretimiento de este primer manto blanco del que no queda nada por debajo de los 2.600 a 2.700 metros de altitud.
Esta nueva gota fría afectará principalmente al este y sur del país, antes de atenuarse para este fin de semana.
Nieve a partir de 1.000 metros sobre el nivel del mar
Como resultado, según el canal meteorológico, se espera que las temperaturas bajen entre 2 y 3 °C por debajo de las normas estacionales. Un frescor que debería descender entre el martes y el miércoles. Esta perturbación, que se desplazará del noreste al suroeste, traerá un rápido paso de las lluvias a la llanura y de nieve a partir de los 1.000 metros de los Vosgos en el centro-este, y de 1.200 a 1.300 metros al llegar a los Pirineos.
En el Jura, los Alpes del norte, pero también en la vertiente norte de Auvernia y en los Pirineos, caerán entre 10 y 15 cm de nieve fresca desde 1.500 metros sobre el nivel del mar. Según los meteorólogos, se espera que las temperaturas aumenten a partir de este fin de semana.
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