El empresario indio Ratan Tata, que transformó el grupo que lleva su nombre en un conglomerado global, falleció a la edad de 86 años, anunció el miércoles. “Es con un profundo sentimiento de pérdida que nos despedimos del Sr. Ratan Navel Tata, un líder verdaderamente extraordinario cuyas inconmensurables contribuciones han dado forma no sólo al Grupo Tata sino también al tejido mismo de nuestra nación”, escribió el presidente de Tata, Natarajan Chandrasekaran. en un comunicado.
El primer ministro indio, Narendra Modi, llamó a Ratan Tata “un líder empresarial visionario, un alma compasiva y un ser humano extraordinario”. Narendra Modi le rindió homenaje por proporcionar “un liderazgo estable a una de las empresas más antiguas y prestigiosas de la India”, que bajo su liderazgo se convirtió en un negocio internacional en expansión que abarcaba desde software hasta automóviles deportivos.
El Grupo Tata dijo que su trabajo filantrópico había “tocado las vidas de millones”
Nacido en 1937 en Bombay, Ratan Tata quería ser arquitecto y trabajaba en Estados Unidos cuando su abuela, que lo crió, le pidió que volviera a casa para incorporarse al negocio familiar, fundado en 1868. Sus primeros pinitos los hizo en una Taller de Tisco (hoy Tata Steel), cerca de los altos hornos, viviendo en un albergue de aprendices. Se hizo cargo del imperio familiar en 1991, aprovechando la ola de reformas liberales que la India estaba implementando en ese momento.
Durante los veintiún años de Ratan Tata al frente de este conglomerado de producción de sal y acero, el grupo se expandió para incluir marcas británicas de automóviles de lujo como Jaguar y Land Rover. El soltero incondicional se jubiló en 2012, pero luego vigiló su imperio, e incluso se hizo cargo del negocio durante unos meses cuatro años después. Desde entonces ha sido presidente honorario.
Las empresas del imperio Tata lograron más de 165 mil millones de dólares en ingresos en 2023-24, superando los 365 mil millones de dólares en capitalización de mercado al final del año financiero a finales de marzo. El Grupo Tata dijo que su trabajo filantrópico había “tocado las vidas de millones”. “Desde la educación hasta la atención sanitaria, sus iniciativas han dejado una profunda huella que beneficiará a las generaciones venideras”, añadió.
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