El exmarido de Gisele Pelicot fue condenado el jueves a 20 años de prisión en Francia por drogarla y violarla, además de invitar a otros hombres a participar durante aproximadamente una década. Foto de Guillaume Horcajuelo/EPA-EFE
19 de diciembre (UPI) — Dominique Pelicot, el exmarido de Gisele Pelicot, fue condenado el jueves a 20 años de prisión en Francia por drogarla, violarla e invitar a otros hombres a participar.
Tras la sentencia, Gisele Pelicot dijo a los periodistas frente al tribunal de la ciudad francesa de Aviñón que “nunca se arrepintió” de haber sido sometida al juicio público de su exmarido Dominique Pelicot y otros 50 hombres.
La sentencia de 20 años impuesta a Dominique Pelicot fue la pena máxima permitida según la legislación francesa.
El hombre de 72 años se declaró culpable de drogar y violar a su entonces esposa durante aproximadamente una década.
Dominique Pelicot conocía a desconocidos a través de Internet y los invitaba a la casa de la pareja para participar en las violaciones grupales.
El juez principal, Roger Arata, declaró culpables a los otros 50 hombres procesados por su participación, tras un juicio muy público que captó la atención del país. Los otros acusados tenían edades comprendidas entre 26 y 74 años y recibieron sentencias que oscilaban entre tres y 13 años de prisión.
Las autoridades dijeron que es probable que más de 70 hombres fueran cómplices de las sesiones, pero no pudieron identificarlos a todos.
Gisele Pelicot fue recibida con vítores y simpatizantes con carteles de aliento cuando salió del tribunal el viernes.
“Estoy aquí con profunda emoción, el juicio fue una prueba muy difícil”, dijo Pelicot a periodistas y simpatizantes.
“Pienso también en las numerosas víctimas que no son reconocidas, cuyas historias a menudo quedan en las sombras. Quiero que sepan que compartimos la misma batalla”.
Pelicot dijo que nunca consideró no seguir adelante con el juicio público.
“Cuando abrí las puertas de este juicio el 2 de septiembre, quería que la sociedad pudiera participar en este debate. Nunca me he arrepentido de esa decisión. Tengo confianza en nuestra capacidad de alcanzar colectivamente un futuro en el que todos, las mujeres y “Los hombres por igual pueden vivir en armonía, con respeto y comprensión mutuos”.
