En total, se cerrarán más de 300 escuelas en Seine-Saint-Denis, una de cada tres en París y más de 60 en Hauts-de-Seine.
Los padres tendrán que adaptarse. La actividad escolar en todos los departamentos de Île-de-France se verá gravemente perturbada este jueves 5 de diciembre debido a un llamamiento nacional a la “acción” y a una huelga de la función pública.
Casi todos los sindicatos han invitado a los docentes a declararse en huelga ante los próximos recortes presupuestarios en las administraciones.
Más de 300 escuelas cerradas en Seine-Saint-Denis, una escuela de cada tres en París
Para ser más precisos, en París una escuela de cada tres permanecerá cerrada el jueves. La huelga será fuertemente seguida por los docentes. Una fuente cercana al asunto indica que alrededor del 70% de los docentes estarán en huelga y, en ocasiones, el 100% de los huelguistas en determinados establecimientos.
“Estuvimos allí durante el Covid-19. Desde hace varios años hay ‘ataques a los docentes'”, lamenta Françoise, una profesora de escuela que estará en huelga, al micrófono de BFM Paris Île-de-France.
En la capital se cerrarán “285 clases intermedias”, es decir, las recepciones extraescolares y los comedores. El ayuntamiento de París aclara a BFM Paris Île-de-France que sólo seis escuelas se beneficiarán del servicio mínimo de acogida.
En los alrededores de París, los Altos del Sena también se verán fuertemente afectados. En el departamento se cerrarán unas sesenta escuelas.
En Seine-Saint-Denis, más de 300 establecimientos permanecerán cerrados este jueves. Habrá “78% de huelguistas en primaria y 80% en secundaria”, anuncia la CGT Educación 93.
Finalmente, en Val-de-Marne, una escuela de cada tres permanecerá cerrada. En Yvelines, cerca de 150 escuelas no abrirán y cerca de 100 en Val-d’Oise.
El gobierno derrocado
En su convocatoria de huelga, los sindicatos mencionaron la reforma de la función pública, que implica restricciones presupuestarias, deseada por Guillaume Kasbarian.
En última instancia, no debería tener lugar, ya que el primer ministro Michel Barnier y su gobierno fueron derrocados por la Asamblea Nacional este miércoles 4 de diciembre.
A partir de ahora, el inquilino de Matignon deberá redactar su carta de dimisión, implicando la de su gobierno, antes de entregársela a Emmanuel Macron.
Martín Regley Periodista