(Actualizado con el levantamiento de la ley marcial)
El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, dijo que levantaría la ley marcial que impuso el martes temprano, acusando a los partidos de oposición de secuestrar el proceso parlamentario, luego de una votación parlamentaria.
La decisión del presidente Yoon de imponer la ley marcial provocó una conmoción en un país que no había experimentado la ley marcial desde 1980 y cuyo régimen se considera democrático.
El presidente surcoreano del Partido Conservador justificó su decisión citando “la amenaza de las fuerzas comunistas norcoreanas”, sin mencionar ninguna amenaza específica de Pyongyang, que posee armas nucleares, centrándose más bien en sus políticas internas.
El Parlamento de Corea del Sur votó a favor del levantamiento de la ley marcial, mientras que el presidente del Parlamento declaró que la iniciativa presidencial era inválida.
Según la ley surcoreana, la ley marcial debe levantarse inmediatamente después de la votación del Parlamento.
Más temprano, soldados aparentemente con órdenes de imponer la ley marcial intentaron ingresar al edificio del Parlamento, según mostraron imágenes de televisión. Los asistentes parlamentarios intentaron repelerlos utilizando extintores.
“Esta declaración es ilegal y constituye un acto criminal, que viola directamente la Constitución y otras leyes”, reaccionó el Partido Demócrata, calificando esta decisión de “golpe de Estado”.
Poco después del anuncio del presidente surcoreano, una multitud se reunió frente al Parlamento y algunos gritaron: “¡Eliminen la ley marcial!”. Otros pidieron el arresto del presidente surcoreano.
“Salí a proteger la democracia. Bajo los dictadores, no podíamos levantarnos, pero ahora podemos”, dijo Im Jin-soo, de 66 años, frente al Parlamento.
El ejército, citado por la agencia de noticias surcoreana Yonhap, precisó algunas de las medidas impuestas bajo la ley marcial, incluida la prohibición de las actividades del Parlamento y de los partidos políticos. Los medios de comunicación y los editores quedan bajo el control del comando responsable de la aplicación de la ley marcial.
“Tanques, vehículos blindados de transporte de tropas y soldados armados con pistolas y cuchillos gobernarán el país”, denunció Lee Jae-myung, jefe del Partido Demócrata, partido mayoritario de la oposición en el Parlamento, durante un discurso retransmitido en línea. “La economía de la República de Corea colapsará irreparablemente. Mis queridos ciudadanos, vengan a la Asamblea Nacional”, instó.
“PROTEGER NUESTRA DEMOCRACIA”
Para justificar su decisión, el presidente citó en particular una moción presentada esta semana por el Partido Demócrata destinada a destituir a algunos de los principales fiscales del país y su rechazo del presupuesto presentado por el Gobierno.
El Partido Demócrata presentó la semana pasada un plan para recortar 4 billones de wones (2.650 millones de euros) del presupuesto propuesto por el gobierno para 2025.
El Ministro de Finanzas de Corea del Sur, Choi Sang-mok, se comprometió a implementar todas las medidas para estabilizar los mercados, tras la decisión de Yoon Suk-yeol, durante una reunión de emergencia con funcionarios económicos en Seúl.
El won, la moneda nacional, alcanzó los 1,430 dólares, su nivel más bajo desde octubre de 2022.
Moon Jae-in, predecesor de Yoon en el Partido Demócrata, denunció una decisión que sumió a Corea del Sur en una crisis.
“Espero que la Asamblea Nacional actúe rápidamente para proteger nuestra democracia del colapso”, escribió en la plataforma X.
Unos 28.500 soldados estadounidenses están estacionados en Corea del Sur para protegerla del Norte. El subsecretario de Estado estadounidense, Kurt Campbell, dijo que Washington sigue la situación en Corea del Sur con “gran preocupación”.
Kurt Campbell dijo que esperaba una resolución pacífica y destacó que la alianza entre Washington y Seúl era “fuerte”.
“Apoyamos a Corea del Sur en estos tiempos de incertidumbre”, dijo.
(Reporte de Jack Kim, Ju-min Park, Hyunsu Yim y Josh Smith, versión francesa de Kate Entringer y Zhifan Liu)
