La agencia rusa “Sputnik” informó que el Reino de Marruecos se encuentra entre los países que discuten con Moscú la adquisición del sistema de defensa aérea S-400, junto con Egipto, Qatar e Irak. Señaló que son varios los países que ya han adquirido este sistema de misiles tierra-aire, entre ellos Turquía, China e India, además de Argelia, que se suma a la lista de operadores de este sistema ruso en 2021, como parte de un acuerdo multimillonario.
El sistema de defensa aérea ruso S-400 entró en servicio en el ejército ruso por primera vez en 2007, y se caracteriza por ser menos costoso en comparación con muchos otros sistemas, como los sistemas American Patriot y THAAD. También se distingue por su capacidad para alcanzar objetivos desde una distancia de hasta 400 kilómetros, y estos objetivos incluyen misiles balísticos, aviones de combate y drones. El sistema también cuenta con un radar avanzado que cubre un círculo de unos 600 kilómetros de diámetro, además de la posibilidad de equiparlo con misiles multimisión, lo que lo convierte en una opción adecuada para el Reino de Marruecos, según las opiniones de los expertos. quien habló con Hespress al respecto.
Estos expertos señalaron que el paso de Marruecos hacia la adquisición de este sistema interceptor se enmarca en una estrategia de defensa integral destinada a reforzar las capacidades de defensa nacional, por un lado, y a diversificar las fuentes de armamento y mantener relaciones equilibradas con las principales potencias del mundo, por otro. al mismo tiempo que continúa la estrategia de garantizar la seguridad nacional y consagrar la superioridad militar de Marruecos en la región del Magreb, mientras Argelia busca armarse de manera intensiva y sin precedentes.
Sistema y relaciones
Abdel Rahman Makkawi, experto en asuntos militares, afirmó: “Es probable que Marruecos haya solicitado la adquisición de este sistema de defensa dada su especificidad operativa. Se trata de un sistema avanzado que puede derribar aviones de combate, así como misiles balísticos, además de drones. .” Moscú lo utilizó para derribar varios drones que el ejército ucraniano obtuvo de Türkiye, que también tiene este sistema a pesar de su membresía en la OTAN”.
Makkawi añadió, en declaraciones al periódico electrónico Hespress, que “el dinamismo observado en las relaciones entre Marruecos y Rusia podría impulsar la adquisición por parte de Marruecos de este sistema ruso, que se distingue por su capacidad de vigilar 300 objetivos simultáneamente, incluidos los que vuelan a baja altura”.
Esto se enmarca en el esfuerzo de Rabat por diversificar las fuentes de compra de armas y no limitarse a proveedores específicos, y por mejorar la independencia de sus decisiones militares y de defensa.
Señaló que “los Estados Unidos de América tal vez no vean este enfoque marroquí como una medida hostil hacia ellos, como lo hicieron con Turquía”, subrayando al mismo tiempo que Marruecos tiene varios sistemas de misiles superiores al “S-400”. ”, incluidos los misiles “Atakum”. Las fuerzas estadounidenses lograron destruir varios lanzadores S-400 durante la guerra en Ucrania y causaron daños importantes a los sistemas de defensa aérea rusos.
El mismo experto militar afirmó que “Marruecos también posee un grupo de misiles avanzados que son difíciles de interceptar por algunos sistemas rusos, como los misiles Tomahawk, y una serie de sistemas guiados que son eficaces en el seguimiento y la interceptación, como el sistema Patriot y otros.” Reveló que la adquisición por parte de Argelia del sistema S-400 incluía una condición para la presencia de expertos rusos dentro de Argelia: “Son ellos quienes controlan el sistema, no los oficiales argelinos, y esta es una condición que Marruecos puede rechazar si Rusia lo intenta. incluirlo en cualquier contrato”.
Habilidades y equilibrio
Hisham Moataded, investigador en asuntos estratégicos, cree que la tendencia de Marruecos a diversificar sus socios en el ámbito de la defensa, incluido el refuerzo de la cooperación con Rusia mediante la adquisición del sistema S-400, “podría reflejar una visión estratégica avanzada destinada a reforzar la soberanía nacional y ampliar las opciones estratégicas.” “A la luz de las actuales transformaciones geopolíticas, Marruecos busca lograr un delicado equilibrio entre fortalecer sus defensas y preservar la independencia de sus decisiones militares, sin depender exclusivamente de socios tradicionales”.
Moataded añadió que el sistema S-400, que ha demostrado su eficacia en numerosos teatros de operaciones mundiales, “puede ofrecer a Marruecos la oportunidad de reforzar sus defensas aéreas frente a posibles amenazas, ya que la adquisición de este sistema permitirá al Reino gran superioridad técnica a nivel de enfrentamiento de aviones y misiles balísticos y alados “Esto mejora su capacidad para proteger su espacio aéreo y sus intereses estratégicos”.
Y continuó: “La diversificación de las fuentes de armas da a Marruecos una mayor flexibilidad a la hora de negociar con sus socios tradicionales, como Estados Unidos y Francia”. La presencia de un socio militar fuerte como Rusia puede empujar a estos socios a proporcionar soluciones más avanzadas en términos más competitivos, lo que mejora las opciones estratégicas del Reino”. Señaló que “la cooperación con Rusia en el ámbito de la defensa puede desarrollarse para incluir la transferencia de tecnología y la fabricación conjunta, lo que podría apoyar las industrias de defensa nacional y crear oportunidades de empleo locales, fortaleciendo así la independencia industrial y técnica de Marruecos y proporcionando una infraestructura de defensa avanzada que sirve a sus intereses a largo plazo”.
Según Hespress, la adquisición del sistema S-400 “mejorará la capacidad de Marruecos para mantener el equilibrio de poder en la región del Magreb, especialmente con el aumento del gasto en defensa de sus vecinos, ya que este paso refleja el compromiso de Marruecos de proteger sus intereses”. y la seguridad nacional, manteniendo al mismo tiempo una posición equilibrada basada en la disuasión estratégica en lugar de la escalada”, destacando que “el avance hacia Rusia se enmarca dentro del marco de la diversificación de las asociaciones de defensa, incluida la adquisición de sistemas avanzados”. “Al igual que el S-400, representa un paso audaz e inteligente que refuerza la posición de Marruecos como país con una visión avanzada que busca siempre equilibrar sus necesidades de defensa con sus intereses políticos y económicos”.