© ASF VINCI / Jean Philippe MOULET
El jueves por la tarde, la A36 se transformó en un enorme aparcamiento cerca de Montbéliard. Debido a las fuertes nevadas, cientos de conductores se quedaron varados, algunos durante más de ocho horas. Este es especialmente el caso de la psicóloga Nadia, que pasó una noche difícil, informa El este republicano este sábado. Saliendo de Montbéliard a las 18 h, no llegó a su casa en Saona hasta las 5:30 de la mañana del día siguientepara un viaje que normalmente se completa en poco más de una hora.
«Estuve completamente parado en mi auto sin información durante horas», les dice a nuestros colegas. Convencido de que el Compañía de autopistas APRRresponsable del tramo, se mostró comprensiva subiendo las barreras de peaje, rápidamente se desilusionó. “Pensé que habrían levantado las barreras a la salida del centro de Besançon, ¡pero no! Tuve que pagar un poco más de 8 euros.. Simplemente me aconsejaron que presentara una queja.“, lamenta, describiendo esta situación como “vergonzoso».
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Este percance no es un caso aislado. El viernes por la mañana, otros conductores, atrapados en dirección contraria cerca de Dole, también tuvieron que pagar el coste del viaje a pesar de pasar horas en atascos causados por la nieve. Estos incidentes ocurren mientras el Estado planea renegociar concesiones viales.
Para algunos conductores, estos hechos ponen de relieve una evidente falta de “habilidades blandas» de los concesionarios de autopistas. Nadia resume el sentimiento general: “Después de semejante experiencia, hubiéramos esperado un gesto simbólico, aunque sólo fuera para eliminar las barreras.” Ante estas críticas, muchas voces piden integrar cláusulas específicas en futuros contratos de explotación de autopistas para garantizar un trato más respetuoso a los usuarios en situaciones excepcionales.
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