Una montaña rusa en Lier. Después de unos minutos, el equipo local se encontró por detrás, pero en la segunda parte todo se centró en Jong Genk. Pero eso se dijo demasiado pronto: en el minuto 95, Nolan Martens arruinó la victoria para Lierse, que continúa su frustrante racha. Los jóvenes de Genk finalmente evitaron el 0 de 15.
En casa, el Lierse SK quiso poner fin esta noche a una racha frustrante de “simplemente nada”.
Pero pronto fue una palabrota para el equipo local. Aunque Lierse reclamó el balón, cayeron en la clásica trampa. Después de una pérdida innecesaria de balón en el centro del campo, Jong Genk respondió con fuerza.
El veredicto tras apenas 10 minutos: 0-1.
Sin embargo, Lierse no se rindió. Al contrario, volvieron a demostrar su dominio y crearon las oportunidades necesarias, pero en la zona de la verdad las cosas les salieron mal con demasiada frecuencia a los nerviosos atacantes.
Al menos hasta la hora. Ousmane Sow, físicamente fuerte, superó a su oponente y empujó hábilmente el balón hacia la segunda zona. Entró Victor Daguin, que marcó el primer gol.
El centrocampista del Lierse no dudó y cabeceó el merecido empate. El hecho de que dos minutos antes se hubiera tolerado un juego de manos cuestionable se olvidó de repente en el estadio Herman Vanderpoorten.
Especialmente cuando Glenn Claes anotó una excelente combinación del equipo local quince minutos antes del final. El resultado final: ¿finalmente una victoria satisfactoria para Lierse?
No, no. En la última fase, el minuto 95, Nolan Martens asestó un fuerte golpe con su segundo gol tras otro contraataque: 2-2.
Una vez más, no para Lierse, un buen punto para Jong Genk.