El ayuntamiento de París, propietario del Parque de los Príncipes, “no nos deja otra opción” que abandonar el estadio, afirmó el jueves el presidente del PSG, Nasser Al-Khelaïfi, deseando “construir lo más rápido posible” un nuevo recinto.
“Me gusta mucho el parque, a todos les encanta. Si escucho a mi corazón, no nos iremos. Pero todo el mundo en Europa tiene estadios con 80.000, 90.000 asientos… Los necesitamos, de lo contrario estamos muertos”, declaró el líder qatarí en RMC con motivo de la inauguración oficial del centro de entrenamiento en Poissy (Yvelines). “Estamos en Francia, pero también en Europa. La ciudad no nos deja otra opción”, insistió, pese a que el Parque tiene una capacidad de 48.000 plazas.
“Yo no hago política. Para nosotros necesitamos un estadio listo en 3 o 4 años, no tenemos tiempo que perder, de lo contrario estaremos detrás de otros clubes de Europa. Necesitamos construir lo más rápido posible”, apoyó el presidente del PSG, evocando “algunas opciones”.
Entre estas hipótesis para construir un recinto de unas 60.000 plazas, se encuentra el sitio de Montigny-le-Bretonneux (Yvelines), según una fuente cercana al asunto, que añade que la ciudad de Aulnay sous-Bois sigue interesada en acoger El futuro estadio. El Club debería tomar una decisión a finales del primer semestre de 2025, afirmó esta fuente.
El pasado mes de febrero, “NAK” ya había anunciado que la salida del Parque de los Príncipes, que el ayuntamiento se negó a vender, era ahora inevitable para su club.
A nivel deportivo, el presidente del club parisino reafirmó su pleno apoyo al técnico Luis Enrique, que no se vería amenazado en caso de una eliminación anticipada en la Liga de Campeones. “No cambiaremos nada. Quedamos eliminados o ganemos, es exactamente lo mismo. Lo dije, tenemos mucha confianza en nuestro entrenador. Hace un muy buen trabajo con Luis Campos. ¿Lo extenderán? Tengo confianza, sí, eso es lo que queremos”, afirmó.
Según nuestra información, Luis Enrique, cuyo contrato finaliza a final de temporada, ha ampliado su contrato en París por dos años más, hasta 2027.
