Venezuela ganó contra Brasil (1-1). El equipo le debe este punto en particular a su portero Rafael Romo.
Brasil definitivamente está pasando apuros en esta fase de clasificación sudamericana para el Mundial de 2026. La Seleçao es cuarta (de diez) del grupo. Ayer la selección viajó a Venezuela, séptima con tres puntos menos, primera nación fuera de los lugares de clasificación.
Sin duda, los auriverdes pensaron que habían hecho la parte más difícil al abrir el marcador con un tiro libre directo de rafina al final de la primera parte (0-1).
Venezuela todavía cree en ello.
Pero Venezuela volvió a la cancha con el cuchillo entre los dientes y empató al inicio del segundo acto. Otro punto de inflexión sobre la hora, cuando los brasileños ganaron un penalti para recuperar la ventaja.
Más Rafael Romo decidió lo contrario. El ex portero del Lovaina (dos temporadas en el Den Dreef) se convirtió en el héroe de la noche gracias a su parada ante un balón demasiado blando de Vinicius.
El astro del Real se culpará a sí mismo: el marcador ya no ha cambiado, lo que impide a Brasil refugiarse en la clasificación. Para Romo, de 34 años y que regresó a Sudamérica hace casi dos años, es, sin embargo, un gran logro.