Un año desde la última vez que la selección francesa pisó el césped del Stade de France. La última vez fue el 15 de octubre de 2023, en cuartos de final del Mundial, contra Sudáfrica (28-29). Un recuerdo doloroso, amargo, que permanecerá así durante mucho tiempo, pero que había que aliviar lo antes posible con victorias sobre el césped dionisíaco. Por tanto, el primero cayó este sábado por la tarde, frente a un Japón complaciente, demasiado ingenuo a pesar de sus buenas intenciones para evitar sufrir una corrección severa. Un éxito que, evidentemente, los ‘bleus’ tendrán que confirmar la próxima semana en el mismo lugar contra Nueva Zelanda, un rival mucho más formidable que acaba de conseguir dos éxitos importantes contra Inglaterra (22-24) e Irlanda (13-23).
