Tras la derrota del Arsenal ante el Inter, Mikel Arteta critica duramente al arbitraje y lamenta dos decisiones importantes que influyeron en el partido.
Tras la derrota del Arsenal ante el Inter (1-0) en la Liga de Campeones, Mikel Arteta expresó su frustración con el arbitraje, que considera “muy difícil de aceptar”. El técnico gunner cree que su equipo fue víctima de decisiones cuestionables, en particular en dos acciones clave: un penalti concedido al Inter tras una mano de Mikel Merino y un contacto entre el portero del Inter, Yann Sommer, y Merino, que el árbitro no sancionó.
Arteta “muy orgulloso” a pesar de la derrota
A pesar del resultado, Arteta dijo que “muy orgulloso” de sus jugadores, destacando su “nivel de dominio y calidad” frente a un formidable equipo italiano. “Merecimos marcar al menos uno o dos goles”añadió, antes de admitir que los detalles en el área marcan la diferencia en la Liga de Campeones.