La tarde del jueves 31 de octubre se produjo un tiroteo seguido de una reyerta en el barrio de Couronneries de Poitiers. Al menos cinco personas resultaron heridas, entre ellas un joven de 15 años con heridas muy graves en la cabeza. El ministro del Interior señala la responsabilidad de las “narcoracailles”.
“Hoy en día, la escoria de las drogas ya no tiene límites”. Invitado a BFMTV-RMC este viernes 1 de noviembre, el Ministro del Interior, Bruno Retailleau, habló del tiroteo seguido de una reyerta que se produjo la noche anterior en Poitiers, en el distrito de Couronneries. “En esta trifulca estuvieron implicados entre 400 y 600 personas”, y al menos cinco personas resultaron heridas de bala, entre ellas un adolescente de 16 años de gravedad.
La hipótesis preferida es la de un ajuste de cuentas en un contexto de tráfico de drogas, explicó una fuente policial a BFMTV. “Está vinculado, se lo confirmo”, aseguró el ministro en nuestra antena, refiriéndose a “un punto de inflexión”.
“Estos tiroteos no están ocurriendo en América del Sur, están ocurriendo en Rennes, en Poitiers, en esta Francia occidental que alguna vez fue conocida por su tranquilidad. Estamos en un punto de inflexión y la opción que tenemos hoy es entre una movilización general o la guerra. Mexicanización del país”, explicó.
El inquilino de Beauvau también anunció su deseo de aprobar una “nueva ley” sobre el tráfico de drogas. “Podemos convertirla en una gran causa nacional”, recalcó nuevamente.
Una “gangrena tras la expansión del narcotráfico”
En “La juventud de las víctimas y de los implicados es particularmente llamativa y preocupante”, añadió.
En la misma red social, el diputado Sacha Houlié, de la segunda circunscripción de Viena, consideró que los hechos ocurridos en Poitiers son “sintomáticos de gangrena tras la expansión del narcotráfico”.
Menciona también dos textos, elaborados con el ex Ministro de Justicia Éric Dupond-Moretti, “uno que crea jurisdicciones especializadas y persecuciones contra el crimen organizado así como un nuevo delito”, “el otro sobre el estatus de los arrepentidos para violar la ley del silencio”. .
Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 22:45 horas, en la plaza de Coimbra, lugar conocido por el tráfico de drogas. Los disparos fueron realizados en un restaurante de la plaza por personas que se encontraban en un coche, que luego huyeron, según supo BFMTV a través de una fuente policial.
La situación degeneró entonces en una pelea entre bandas rivales, en la que participaron varios cientos de personas en el momento más tenso.