El 8 de mayo de 2022, poco después de las 23 horas, Antoine Alléno, de 24 años, cerró su hamburguesería Père & Fils, situada en el 7mi distrito de París, se sube a su scooter y lleva a un colega en el asiento del pasajero para que la acompañe. Quiso el destino que esa misma tarde Franky D., un techador de 25 años residente en Val-d’Oise, ya condenado siete veces por robo, tentativa o recepción de objetos robados, fuera con su familia a un restaurante vecino. , Coya, claramente menos interesado en la cocina fusión de inspiración peruana así como en los potentes sedanes que los clientes de este opulento establecimiento confían al valet.
Franky D. sube a un Audi RS6 que no es suyo, pero cuyas llaves ha conseguido robar, y se marcha con estrépito. Dos kilómetros y medio más adelante, en la avenida Bosquet, intenta pasar a gran velocidad entre un taxi y la scooter de Antoine Alléno que esperan en el semáforo en rojo. El Audi choca contra el primero y rebota hacia el segundo. Antoine Alléno y su pasajero quedan despedidos. El primero muere, el segundo resulta herido.
Franky D. conducía demasiado rápido: un pico de 120 km/h en una avenida limitada a 30; 77 km/h en el momento del impacto. Sin licencia: retirada en 2018, por exceso de velocidad. Alcohólica: 1,69 gramos por litro de sangre. Detenido mientras huía a pie, el automovilista fue juzgado el jueves 31 de octubre, antes de las 10mi sala del tribunal penal de París, junto a su suegro Franck, de 47 años, y su cuñado, llamado Sniper, de 20 años, acusados de haber participado en el robo del vehículo. Todos parecían libres.
Una propuesta de ley
Con las manos entrelazadas detrás de su chaqueta negra, Franky D. admitió los hechos con los labios, preguntó ” indulto “ mientras dice “imperdonable”y aplicó una estrategia de defensa basada en dos puntos: uno, “Es el alcohol el que hizo todo esto” ; dos, “No recuerdo nada”. Ni siquiera lo que hacía al volante de este Audi, ni los cinco semáforos en rojo encendidos, las dos calles tomadas en sentido contrario, la VTC embestida para abrir paso, los dos peatones y el repartidor de bicicletas rozados, ni el final colisión.
Qué 8 de mayo de 2022, “Te lo puedo contar claro, porque no me he olvidado de nada”dijo Yannick Alléno, el primero en subir al estrado para expresar su dolor y rendir homenaje a su hijo, antes de que declararan sucesivamente la madre, el hermano, la novia y el pasajero del scooter, mientras las cabezas de los acusados desaparecían un poco más entre sus hombros con cada testimonio.
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