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En las agitadas olas de Torremmolinos (España), la campeona olímpica no se lo puso fácil. Pensando que apuntaba a la boya adecuada, se aisló al inicio de la carrera, lejos del resto de competidores. 31ª al final de la primera vuelta de natación, la francesa limitó los daños arrancando la bicicleta 10ª, a 15 segundos de la cabeza. Rápidamente volvió al grupo de cabeza, antes de lanzarse al circuito de carrera a pie.