Comunicado de prensa de Francia insoumise y del grupo LFI-NFP
El 7 de octubre de 2023, el ataque de Hamás en suelo israelí dio lugar a crímenes de guerra durante los cuales 1.200 personas, entre ellas más de 800 civiles indefensos, fueron asesinadas y se secuestraron rehenes. Varias decenas todavía lo son, entre ellos dos de nuestros compatriotas. Exigimos su liberación inmediata.
En respuesta a este acto terrorista, el gobierno de extrema derecha de Netanyahu lanzó una guerra total contra el pueblo palestino. Oficialmente 41.909 personas han muerto en Gaza y decenas de miles de víctimas más están enterradas bajo los escombros o con heridas que amenazan su supervivencia. Las condiciones infligidas a Gaza, casi completamente arrasada y cuya población está asediada, hambrienta, desplazada masivamente por la fuerza, privada de cuidados básicos, son tales que en enero de 2024 la Corte Internacional de Justicia, máximo órgano judicial de la ONU, denunció una actitud genocida. . La brutalidad de la respuesta israelí también provocó una intensificación de la colonización en Cisjordania que provocó la muerte de 741 palestinos.
Finalmente, desde hace varias semanas, reforzado por la ausencia de una condena clara por parte de las potencias occidentales, el gobierno de Netanyahu ha extendido la guerra al Líbano, sobre el que el secretario general de la ONU y el presidente Macron han expresado su temor de que se convierta en una “nueva Gaza”, y Violó la soberanía de Siria, Yemen e Irán. Esta regionalización de la guerra conlleva inmensos peligros. La decisión del gobierno de Netanyahu de declarar persona non grata al secretario general de la ONU, acusado a su vez de antisemitismo, todavía nos alarma.
Rendimos homenaje a las víctimas de la masacre del 7 de octubre y a las decenas de miles de víctimas civiles que murieron bajo los bombardeos del gobierno de Netanyahu y exigimos que los criminales de guerra sean llevados ante la justicia internacional, como solicitó el fiscal de la Corte Penal Internacional. Exigimos la liberación inmediata de los prisioneros palestinos detenidos ilegalmente en cárceles israelíes.
El terror nunca ha liberado a un pueblo ni ha resucitado a los muertos. Pisotear todas las normas del derecho internacional y del derecho de la guerra es un callejón sin salida. La guerra interminable no ofrece ninguna solución política duradera capaz de garantizar los derechos y la seguridad de los pueblos palestino, israelí y ahora libanés.
Por eso reafirmamos que el deber primordial de Francia es actuar por un alto el fuego global e inmediato. Para lograrlo, Francia debe tomar todas las medidas necesarias: sanciones contra el gobierno de Netanyahu, interrupción de los acuerdos de cooperación económica, embargo de armas y reconocimiento del Estado de Palestina.