El KRC Genk volvió a ser uno de los grandes ganadores del fin de semana. Mientras varios rivales perdieron puntos, el líder ganó los tres puntos contra Mechelen. Y el entrenador Thorsten Fink tiene mucho que ver en ello.
Antes de la llegada de Mechelen, el Racing rebosaba confianza tras seis victorias consecutivas en el campeonato. Pero los Limburgers no lograron alcanzar el nivel deseado durante mucho tiempo. De hecho, los visitantes fueron el mejor equipo y tuvieron las mejores ocasiones en la primera parte.
Cuando regresaron del vestuario, Racing no ofreció nada mejor. Fue entonces cuando Fink decidió intervenir radicalmente. De un solo golpe, sacó a Jarne Steuckers, Tolu Arokodare y Kos Karetsas.
Una intervención de oro
El técnico alemán corrió un riesgo considerable, pero su intervención finalmente dio sus frutos. Poco después del triple cambio, KV marcó. Pero luego Genk empezó a jugar mucho mejor. Lo que finalmente llevó a dos goles decisivos del suplente Hyeon-gyu Oh.
El analista Thomas Chatelle felicitó más tarde a Fink. “Lo conocemos como alguien que da mucha confianza a sus jugadores, pero también ha demostrado que no duda en intervenir cuando las cosas no van como quiere. Karetsas, Steuckers y Tolu no estuvieron bien en el partido, pero aun así demostró valentía reemplazando a los tres antes del minuto sesenta”, añade Het Belang van Limburg.
Un núcleo amplio
Además, Fink subrayó la confianza en sus sustitutos y demostró una vez más que Genk también tiene una selección sólida en ancho. “En retrospectiva, este fue un entrenamiento audaz pero exitoso por parte de Fink. Esto también confirma la sensación de que Genk tiene un banquillo fuerte esta temporada. La victoria puede ser halagadora, pero hay muchas cosas positivas que pueden sacar de esta victoria en Genk”, concluyó Chatelle.