La imagen de Audrey Tautou estaba en todas partes, por lo que Audrey Tautou tuvo que recuperar su imagen. Y desde 2017, año de su retirada de los platós cinematográficos, la intérprete de Amélie Poulain ha llegado lo suficientemente lejos como para utilizar el autodesprecio con este fin.
Con superficialun álbum de fotos publicado por Fisheye, da una mirada única al mundo y a ella misma, a su condición de estrella a través de textos personales, autorretratos e incluso cartas de fans. “Soy la única capitana de mi barco”, resume.
el shock
Barco que, en el momento de la notoriedad, reveló una fuga, según palabras de la actriz de 48 años en El parisino. “Durante el rodaje deAmélie Poulaintodos me alertaron de lo que podía suceder: Jean-Pierre (Jeunet), Mathieu Kassovitz, Jamel (Debbouze)… Para mí, fue totalmente abstracto. »
Porque eso es lo que destino fabuloso quien impulsó el suyo. “Antes había hecho Belleza de Venus (Instituto) que había tenido mucho éxito, y yo había ganado el César… Pero con ameliafue muy repentino y muy importante”, recuerda.
De repente, Audrey Tautou se ve abrumada por la notoriedad, hasta el punto de que ni siquiera despegar es suficiente. “No podía permanecer anónimo en ningún lado. Fui a Perú, Chile, Argentina, Rusia, Canadá, Japón y China, me reconocían en todas partes”, añade.
mirando hacia abajo
Por tanto, debemos utilizar “técnicas de autoprotección” para evitar hundirnos. “Cuando caminaba por la calle o entraba a un restaurante, siempre miraba hacia abajo”, admite. Esta situación “incómoda” se compensa temporalmente con los aspectos positivos.
“Aún tenía un trabajo que me encantaba, conocí gente estupenda, viajes maravillosos, experiencias extraordinarias y únicas…”, procrastina.
La que es madre desde 2019, sin embargo, no ha abandonado los escenarios. Hace unos meses jugó en charlotteun espectáculo musical adaptado de la novela de David Foenkinos inspirado en el trágico destino de la artista Charlotte Salomon. La fotografía y la escritura le brindan la salida que necesita para seguir adelante y dejar atrás a Amélie.
“Como no era algo que había buscado o esperado -por muy extraño que parezca cuando uno quiere ser actriz- viví este fenómeno con distancia. Por eso documenté lo que me pasaba con fotografías y textos”, confiesa Audrey Tautou.
La fotografía le permitió así “mantener la mirada escondiéndose detrás de la cámara. Porque cuando somos observados, ya no podemos mirar a los demás ni a las cosas como antes. Pero tengo mucha curiosidad”. Y sin duda también lo serán los fans, que no dudarán en pasar al otro lado del espejo con esta obra.