El resto después del anuncio.
Esta es una noticia que sorprendió a todos. El pasado mes de octubre, Sophie Tapie anunció que estaba embarazada de su segundo hijo con un bonito anuncio oficial de Baptiste Germain y su hijo César. “Pronto (pronto) 4 Gerpies”escribió. “Gerpies” siendo el apodo que le puso a su pareja, una mezcla entre Tapie y Germain. “Queríamos tener niños juntos, por lo que era natural tener un segundo. Pensamos que intentaríamos tener uno a principios de 2025 y luego sucedió antes. Hace tres meses, supimos que Sophie estaba embarazada. Fue intencional, pero inesperado. Debemos creer que ambos estamos conectados.se alegra el jugador de rugby de Aviron Bayonnais en una entrevista concedida a gala.fr.
Todo va bien entre la hija de Bernard Tapie y el guapo jugador de rugby, aunque los 12 años que los separan hayan sido un tema al principio. “Lo hablamos, pero lo cerramos muy rápido. Era sólo un número”.afirma el jugador de rugby que se casó con Sophie Tapie en una ciudad querida por él, antes de contar más sobre su personalidad y su experiencia: “Salí joven para jugar al rugby, salgo con hombres mayores que ya son padres de familia, entonces creo que he adquirido cierta madurez. El retraso no se sintió. Pero nos hace gracia cuando sus amigos hablan de ciertas referencias que yo no tengo. Nuestra diferencia de edad es más una fortaleza que cualquier otra cosa.“.
Sophie Tapie no quería tener hijos al principio
Las cosas fueron especialmente rápidas entre los dos tortolitos, que se mudaron juntos, se casaron y pronto tendrán dos hijos juntos. “Al principio yo vivía en Biarritz, ella compartía su vida entre París y la Costa Azul. estamos muy cercano nos veíamos lo suficiente como para nuestro gusto, así que vivimos juntos muy rápidamente. Y luego vino la cuestión de formar una familia…”explica Baptiste Germain, que aún no ha estado de luna de miel con Sophie Tapie, antes de explicar el pensamiento que le llevó a tener hijos: “Me sorprendieron estos jugadores que se reunieron con sus hijos al final del partido. Siempre me imaginé siendo padre entre los 23 y 25 años.. Sabía que podía arreglármelas. Al principio Sophie no quería, tengo que creer que terminé convenciéndola. Su madre la trajo tarde, no quería perder el tiempo”. ¡Así no habrá perdido ninguno!