Más de un año después del dramático accidente provocado por Pierre Palmade, Yuksel Yakut y su familia viven una auténtica pesadilla. A medida que se acerca el juicio del comediante, que comenzará el 20 de noviembre, Yuksel, víctima de la colisión, habla de su sufrimiento y el de su hijo.
Yuksel recuerda cada detalle del 10 de febrero de 2023: “Tuve especial cuidado. Por supuesto, usamos nuestros cinturones de seguridad. Tuve mucho cuidado, conduje despacio”.
Enfrente, Pierre Palmade, bajo los efectos de cocaína y 3MMC, se desvió repentinamente de su trayectoria y chocó frontalmente con el Renault Mégane de Yuksel. En el vehículo viajaban Yuksel, su hijo Devrim, de 6 años, y su cuñada, que está embarazada de seis meses y medio.
“Siento que mi cerebro va a explotar”.
“Tengo un dolor tan intenso que estoy exhausto y siento que mi cerebro va a explotar”, confiesa Yuksel Yakut a las cámaras de “Sept à Huit”.
Después de haber sido sometido a múltiples operaciones en el estómago, piernas, pies y hombros, ahora vive con secuelas permanentes: “Cuando camino, las placas que tengo en las piernas me causan mucho dolor. Incluso para lavarme y caminar tengo que pedir ayuda a mis seres queridos”.
Su hijo de 6 años, también gravemente herido, sufre ataques de pánico y dificultades en la escuela. “No le está yendo nada bien. Ya no quiere salir porque tiene cicatrices en la cabeza y sufre dolores constantes”.
En cuanto a su cuñada, de 27 años, perdió al hijo que llevaba encinta.
“Solo quiero una cosa…”
“No sé cuál será el futuro para mi hijo y para mí. ¿Podré volver a trabajar algún día? ¿Me quedaré en este estado? No lo sé”, admite.
“Él hizo de nuestras vidas un infierno. Sólo quiero una cosa: que pague por lo que hizo”, concluye.
El juicio contra Pierre Palmade, previsto para el 20 de noviembre, se celebrará por lesiones involuntarias, ya que la justicia no ha estimado el homicidio involuntario por la pérdida del feto.