Los médicos de la reina de Inglaterra le aconsejaron prolongar su convalecencia para recuperarse por completo de su infección pulmonar.
“Muy decepcionada”, la esposa de Carlos III espera retomar sus actividades públicas “a principios de la próxima semana”.
Estará ausente de las ceremonias de conmemoración previstas para este sábado y domingo en Londres, a las que asistirá la Princesa de Gales.
Ella continúa descansando lejos del bullicio real. Aún sufriendo, la reina Camilla se ausentará de las ceremonias conmemorativas organizadas este fin de semana en Londres en homenaje a los británicos muertos en combate durante la Primera Guerra Mundial. La esposa de Carlos III, que canceló todos sus compromisos esta semana, todavía se mantendrá un poco abrigada en su propiedad de Wiltshire “de acuerdo con el consejo de los médicos, para garantizar la recuperación total de la infección pulmonar estacional y proteger a otros de cualquier riesgo potencial”.
Un concierto y una colocación de flores.
“Si bien esto será una gran decepción para la Reina, celebrará la ocasión en privado en casa y espera regresar a sus deberes públicos a principios de la próxima semana”.especifica un comunicado de prensa del Palacio de Buckingham sobre este Día del Recuerdo en el que participan los Windsor cada año. La foto familiar habría quedado casi perfecta en presencia de Camilla, de 77 años, porque estos hechos marcarán un poco más el regreso a la vida normal de la familia real británica. Sus servicios confirmaron la presencia de Kate Middleton, que hará su primera gran aparición oficial en Londres desde el anuncio del fin de su quimioterapia.
La Princesa de Gales participó este verano en Trooping the Colour, el desfile de cumpleaños del Rey, y desde entonces ha vuelto al trabajo paso a paso. Estará este sábado por la noche en el Royal Albert Hall para asistir al Festival of Remembrance, un gran concierto dedicado a las fuerzas armadas británicas en el que actuará, en particular, el cantante Tom Jones. También se espera a su marido, el príncipe Guillermo, y a su suegro Carlos III, sin su esposa. Al día siguiente, es en el Cenotafio donde los Windsor depositarán una corona de flores, como manda la tradición.